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Hace apenas un mes su padre le había regalado un auto. Dijo que se lo obsequiaba para que junto con su esposo pudiera llevar las mercancías que necesita para el negocio de hamburguesas que abrieron hace unas semanas y para que no batallara al trasladarse con su pequeño hijo en el transporte público.
Pero el pasado lunes, Estefanía H., de 21 años, residente de la colonia Buenos Aires, municipio de Querétaro, sintió que sus sueños se derrumbaban al ver que su automóvil había desaparecido. Y es que a pesar de que su carro Datsun era un “mo delo viejito”, era parte importante de su incipiente patrimonio.
Agradece que el robo no fue con violencia; sin embargo, “también te duele ver cómo te quitan algo que con mucho esfuerzo lo mantienes y te sirve para moverte y, en mi caso, era un apoyo para mi negocio de hamburgesas”, dice.
La mañana del pasado lunes, Estefanía H, en compañía de su esposo y de su pequeño hijo, se dispusieron a desayunar en el tianguis de la Peña, en la colonia Loma Bonita, un mercado sobreruedas muy popular entre los vecinos de la zona y en el que también existen ciertos antecedentes de inseguridad.
“Fuimos al tianguis de la Peña y dejamos el carro donde todo mundo lo deja, fuimos a desayunar y de regreso, ya no estaba nuestro coche. Me impresioné mucho y a pesar de que es algo material, si nos dio mucho coraje, que hasta nos pusimos a llorar mi esposo y yo”.
Por desgracia, esta es una realidad que han vivido cientos de queretanos y que en los últimos años se ha incrementado. Sólo durante 2015 se reportaron 3 mil 640 robos de vehículo sin violencia y 252 asaltos a vehículo con violencia.
“Me siento muy mal, me da mucho coraje, siento que el gobierno no está haciendo su trabajo. Nosotros apenas nos íbamos levantando con nuestro negocio para que estos desgraciados vengan y se lo roben sin que pase nada”.
Cuenta que recorrieron varias calles de Loma Bonita con la esperanza de encontrarlo, sin ser conscientes que de haberlo hecho, pudieron haber corrido algún riesgo al tratar de enfrentar al o a los delincuentes, pero no lo hallaron.
Reportaron el hecho al número de emergencia 066, donde les pidieron levantar la denuncia en la agencia del Ministerio Público de la Procuraduría General de Justicia del estado de Querétaro (PGJ), ubicada en la comunidad de la Noria, municipio de El Marqués y que se especializa en la investigación de robo de vehículos.
Después de dos horas, a Estefanía H. y a su esposo les tomaron sus datos para que sólo recibieran un “habrá que esperar” como respuesta de las autoridades judiciales.
