En su séptima jornada, el contingente de Mujeres al Tepeyac dejaron la Sierra Gorda y entraron de lleno al semidesierto queretano, para llegar por la tarde a Vizarrón en el municipio de Cadereyta.
El clima fue benevolente, ya que las nubes cubrieron todo el camino, lo que les permitió avanzar a paso más rápido.
Partieron de madrugada de la cabecera municipal de Pinal de Amoles, y se sumaron un promedio de 150 mujeres, todas con la misma ilusión. Doña Juanita Aguas mira a sus hijos, les da la bendición, deja indicaciones, “la comida la hace tu hermana, y tú vas por la leña, no se les olvide rezar el rosario”, comenta.
Gilda García Alcocer, presidenta de las peregrinas, dice que todo ha marchado sin novedad: “Vamos muy bien, sin problema alguno, hoy el señor obispo está caminando con nosotros, hasta el momento venimos muy bien atendidas, sin ningún contratiempo, el domingo primero Dios nos reunimos en San Juan del Río, con el contingente que va de la capital, vamos con una manifestación de mucha fe”.
Gilda García comenta que el clima ha ayudado mucho en esta jornada, “ha estado nublado, hemos estado caminando con mayor tranquilidad, y seguimos invitando a toda la gente para salga a ver esta grandiosa manifestación de amor a la Virgen de Guadalupe”.
El séptimo día de caminata es uno de los más difíciles de recorrer, ya que en un solo día se cruza todo el semidesierto, bajo un calor de más de 38 grados centígrados.
La solidaridad de los lugareños se hizo presente, carne de puerco en chile verde, mole, frijoles, tacos, tortas, gorditas, agua y refrescos, fueron ofrecidos por la comunidad.