Son más de 8.5 toneladas de basura las que diariamente se generan en el interior de la Central de Abastos. Recolectores de los desperdicios aseguran que 90% son frutas, verduras y legumbres que se golpearon o echaron a perder.
El resto de los desechos son madera, cartón y plástico, mismo que se incorpora a la basura orgánica.
Martha Becerril quien desde hace 20 años trabaja en la Central de Abastos asegura que la generación de desechos principalmente se da en las primeras horas de la mañana; para las 10 en el contenedor ya se registra una gran cantidad de basura misma que es trasladada en camiones del municipio.
“Todos los día nos encargamos de limpiar la central, pero como todo el día hay movimiento, este empieza a las tres de la mañana y termina como a las cinco de la tarde. Lo que más nos preocupa son las ratas, aquí hay que saber convivir con ellas, porque corren por todos lados y se alimentan de todo lo que encuentran”, dijo.
Las enfermedades de la piel y la exposición a la fauna nociva es el pan de cada día para los recolectores que por más que intentan mantener limpias las naves industriales de la Central de Abastos, a veces no lo logran, porque aseguran que no es posible por las grandes cantidades de alimentos perecederos que llegan para su venta.
Los cargadores afirman que al día trasladan alrededor de 200 a 300 kilos de frutas y verduras a diferentes zonas de la central.
“Empecé a trabajar aquí a los 15 años, ya llevo siete. Todos los días empiezo a las cinco de la mañana, no quise seguir estudiando, la escuela no me gustaba porque mis compañeros me decían que solo servía para cargar. Un día me invitan a trabajar cargando bultos y me gusto ganar dinero todos los días; al menos al día son entre 200 y 250 pesos los que junto” dijo Marcos Rodríguez.
Los siete camiones recolectores de basura llegan completamente vacíos y al menos tienen que dar cada uno tres vueltas desde este espacio al tiradero municipal de Mompaní, para descargar todos los desechos que se generan en la Central de Abastos. Los trabajadores de limpia mencionan que a pesar de los guantes de seguridad, las mordidas de los roedores son muy frecuentes.