Las zonas boscosas de San Juan del Río carecen de la denominación ‘áreas naturales protegidas’; por tal motivo se les considera vulnerables a la deforestación o crecimiento urbano irregular, advirtió la regidora presidenta de la Comisión de Ecología, Yolanda Rodríguez Otero.
En los límites de San Juan del Río con Amealco, entre las comunidades de Perales y El Rincón, hay más de 3 mil hectáreas de bosque de mezquites y encino afectados por la tala clandestina, de acuerdo con datos de la Dirección de Ecología municipal.
La regidora reconoció que aunque estas hectáreas son reconocidas como zona de reserva, carecen de la denominación para que se les proteja de la deforestación o invasión de pobladores.
“Buscamos en las instancias correspondientes la declaratoria de áreas naturales protegidas, y ver la forma de que estos bosques de encino que colindan con Amealco se reconozcan como tal y se evite la tala clandestina”, afirmó Yolanda Rodríguez
En la misma situación se encuentra la comunidad de La Magdalena, que tiene zona boscosa reservada pero carente de la denominación para que sea protegida de la urbanización, de acuerdo con la regidora.
“Al protegerse estas zonas, se evitará que las personas se asienten en los bosques, que talen los árboles clandestinamente y se persigan a los responsables que afecten estas áreas”, agregó.
Las reservas territoriales de San Juan del Río han sido afectadas con la extracción de tierra, talas para la elaboración de leña y en casos aislados, se han asentado familias irregularmente, aseguró la regidora de Ecología
Rodríguez Otero reconoció que también habitantes de la zona recurren a estas prácticas como forma de subsistir, sin percatarse del daño que causan a este territorio.
Sin embargo, insistió en que no existe actualmente manera alguna de proteger estas zonas que son reconocidas por el municipio como áreas de reserva.
La comisión y la dirección de Ecología harán un estudio para determinar el número total de hectáreas que requieren la declaratoria de áreas naturales protegidas.