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En el estado algunas empresas y universidades están apostando por una educación de modelo dual, con el cual además de tener los conocimientos teóricos que brindan los profesores en las aulas, también logren la experiencia de estar en una compañía enfrentando los problemas de la vida laboral.
“Urge capacitación en el personal de las empresas para que se pueda generar una cultura de beneficios en México”, comentó el ex alcalde alemán, George Eickhoff, quién ahora funge como capacitador y couch de la universidad Mondragón-Uco, en Querétaro.
Durante su visita a este centro de estudios, reconoció la labor de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), para promover este tipo de educación en el estado.
De acuerdo con el experto, en México hace falta un esfuerzo por parte de las universidades, cámaras, y asociaciones fijas, de tratar de entender que al final todos se benefician, pues, dijo, sí hay una cultura compartida, un empleado se puede ir, pero otro viene ya capacitado, lo que genera una mayor productividad en las empresas, además se refleja en un menor gasto de capacitación de los empresarios.
“La empresa se tiene que plantear como retener talento. Una universidad como esta, puede hacer un gran aporte de ese cambio cultural necesario, para avanzar en un país cada vez más moderno, y volcado a la economía de la información.”, puntualizó.
Y es que, según el ex alcalde, todo éxito de una empresa gira alrededor del capital humano, y ese es un punto que México debe de voltear a ver, pues “es interesante ver cómo crece dicha cultura, respetando al trabajador; ofrece algo mejor y van a venir hacia ti”, dijo.
George Eickhoff, especialista en coaching, indicó que el sistema dual es de los más efectivos en Alemania, en dónde la idea principal es que se invierta en alguien; primero debe ser contratado por la empresa y la empresa te debe de dejar estudiar y seguir capacitándote en tu puesto.
“Tienes estipulado un día a la semana en tu contrato para que puedas estudiar. Hay universidades también que ya están vinculándose, como es el caso de Mondragón-Uco en México. Claro que este empleado que ya se capacitó y que tiene un valor capital y humano acumulado, se puede ir a otra empresa, claro, es un país libre. Es el riesgo que existe, pero si la cultura fuera que en todas las empresas lo hicieran, sería recíproco”, declaró.