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Los 36 elementos de la Policía Estatal (PoEs) que reprobaron los exámenes de evaluación de control y confianza fueron reubicados en otras áreas.
El secretario de Seguridad Ciudadana, Adolfo Vega Montoto, informó que estos policías no fueron dados de baja, para no poner en riesgo la integridad de la corporación.
Explicó que la mayoría de los policías fueron cesados de sus funciones, principalmente, por cuestiones físicas o de salud.
Por tal motivo, el trabajo en las calles no puede ser realizado por estos elementos, debido a los altos niveles de presión requeridos y les asignan un trabajo de escritorio.
“En la Secretaría de Seguridad Ciudadana no tenemos ningún caso que ponga en riesgo la seguridad. Hay personas con enfermedades como diabetes o con algún problema físico. Tenemos 36 elementos que han sido reubicados, en áreas administrativas, en áreas de trabajo intramuros”, destacó el funcionario.
Algunos de estos integrantes de la Policía Estatal pasan a servir como instructores para las nuevas generaciones, después de haber presentado más de 15 años de servicio y experiencia que puede ser aprovechada por los elementos más jóvenes.
Otros son ubicados en puestos administrativos, llevando los reportes de los elementos que se presentan a la dependencia de seguridad. Incluso, vigilando edificios públicos.
