Más de la mitad del drenaje del Centro Histórico requiere ser modificado debido a su antigüedad, indicó el delegado de la zona, José Niembro Calzada, lo anterior, luego de que hace unos días se presentara un hundimiento de pavimento en la avenida Universidad derivado de las fuertes lluvias.

El delegado refirió que el Centro Histórico no ha sufrido mayores afectaciones de las contingencias pluviales, a excepción del hundimiento en dicha zona, mismo que ya ha sido atendido de forma inmediata y reforzado con el fin de que no vuelva a presentarse.

“La antigüedad del drenaje del Centro Histórico oscila entre casi 100 años, por lo que resulta necesario restaurarlo, ya que se convierte en uno añejo que representa riesgos en las superficies en las que se pudiera encontrar”, expresó.

Respecto a la presencia de baches y desperfectos que se pudieran presentar, el titular de la jurisdicción del Centro Histórico afirmó que se han recibido algunas peticiones de restaurar algunos en varias zonas que se han presentado, por lo que ya se han canalizado a dependencias como la Secretaría de Obras Públicas Municipales, con el fin de que sean reparados.

“Hemos detectado algunos baches en algunas zonas del Centro Histórico, mismos que ya han sido informados a la Secretaría de Obras Públicas para que tome cartas en el asunto y se estén atendiendo a la brevedad durante esta temporada de lluvias”, estableció.

Recordó que como parte de los trabajos que realiza dicha delegación para escuchar peticiones en mejoras de infraestructura, en mayo se realizó el taller de Diseño Participativo que tuvo el propósito de involucrar a la sociedad en la toma de decisiones y el diseño de propuestas para mejorar la calidad de vida en el Centro Histórico.

“Esto obedece al interés del alcalde de Querétaro, Roberto Loyola Vera, de tomar siempre las decisiones compartiendo los intereses y los puntos de vida que de la ciudadanía. El año pasado tuvimos una gran experiencia en el barrio de San Francisquito, donde salieron 13 proyectos que ya se desarrollan”, destacó Niembro Calzada.

De acuerdo con el delegado, el Centro Histórico, cuya antigüedad es de 487 años, presenta problemáticas que varían desde el número de cajones de estacionamiento, el olor del drenaje, los franeleros, antros y el tránsito pesado.

Dejó en claro que tanto la delegación como el municipio de Querétaro, trabajan en coordinación con el fin de buscar alternativas y soluciones a este tipo de situaciones.

“Mantenemos un trabajo cercano con las dependencias municipales con el objetivo de informarles todo lo que acontece en el Centro Histórico, desde peticiones de ciudadanos, hasta propuestas que pudieran abonar en mejorar la infraestructura de la ciudad”, apuntó.

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