Más Información
Tenencias atrasadas, facturas sin endosar o la ausencia de tarjetas de circulación son algunos de los problemas que resuelven los coyotes que abordan a los dueños de vehículos que no cuentan con sus documentos en regla.
De ocho de la mañana a dos y media de la tarde, en las oficinas de recaudación de ingresos ubicadas en el auditorio Josefa Ortiz de Domínguez, un grupo de hombres y mujeres que se autodenominan “gestores” atienden a los incautos que necesitan con urgencia desde facturas testimoniales, que acrediten la propiedad de sus automóviles, hasta placas para vehículos, ya sean de origen nacional o americano.
Uno de ellos es el señor Ocampo. Camisa café percudida, lentes oscuros y una cadena de la Virgen de Guadalupe forma parte de su vestuario. Su lugar habitual de trabajo es una esquina, al lado de la entrada principal del auditorio, donde permanece desde las nueve de la mañana hasta las tres de la tarde.
-¿Saben dónde puedo hacer un trámite de cambio de propietario?, pregunto a un grupo de hombres. El señor Ocampo es quien responde y se presenta como gestor.
Antes de mí, atiende a otro cliente que necesita con urgencia dar de baja de su vehículo porque sus placas tienen reporte de robo, le da una cotización de mil 200 pesos, para realizar el trámite, y cuando llega mi turno, le explicó que necesito, con prontitud, hacer un cambio de propietario.
—Necesitas traerme dos comprobantes de domicilio, dos copias del IFE, la tarjeta de circulación, la factura del dueño, una carta poder y el pago de tu tenencia, ¿la tienes completa?, me pregunta el ‘supuesto’ gestor.
—Sólo me falta en comprobante de pago de la tenencia de este año, pero no tengo la tarjeta de circulación ni la factura endosada a mi nombre, como nuevo propietario del vehículo, respondo.
—En ese caso necesitas dos cartas poder. ¿La factura del dueño es la original o la copia?
—La copia.
—¡No hay problema! Te sale en mil 500 pesos con “lo mío”.
Como parte de los requisitos para obtener el cambio de propietario, de acuerdo con la página de Gobierno del Estado de Querétaro, se necesita una identificación vigente del propietario de vehículo, un comprobante de domicilio y un comprobante fiscal; sin embargo, los requerimientos se engrosan cuando el vehículo es de procedencia extranjera, o si proviene de otra entidad federativa.
Al final de la página del portal, se menciona que, en todos los casos, la factura debe estar a título del propietario o endosada a su nombre. Sin este documento es imposible avanzar en el proceso.
Trámite legal.
Las oficinas de recaudación para realizar los trámites vehiculares se encuentran debajo del auditorio Josefa Ortiz de Domínguez. Unas escaleras llevan a una habitación blanca llena de sillas de espera y pantallas que indican los turnos.
Al entrar en un pequeño módulo, un hombre uniformado pregunta a cada persona el trámite que va a realizar y dependiendo del caso, se le asigna un turno. Para un cambio de propietario, el número asignado es I326 y en las pantallas, hay al menos ocho turnos diferentes. El más cercano es I303.
Al interior del lugar, hay sillas repletas de gente que espera pacientemente su turno en las pantallas. Pasan alrededor de 15 minutos y el señor Ocampo aparece entre la fila de espera. También tiene un turno y a su lado, aparece otro hombre que viste una playera blanca con una faja negra en la cintura. Lleva gafas oscuras y en sus manos, un bonche de documentos.
Después de 40 minutos, en la pantalla aparece el número I326 y en la ventanilla número 40, un hombre con camisa blanca solicita una credencial de elector, la CURP, un comprobante de domicilio, la tarjeta de circulación y la factura endosada.
—¿Qué pasa si no cuento con la factura endosada?
—No se puede realizar el trámite. ¡Cómo acredita la propiedad de su vehículo!, dice el hombre con la playera bordada con el nombre de Secretaría de Finanzas.
El empleado también menciona que en caso de no contar con tarjeta de circulación, debo que pagar cien pesos adicionales para emitirla. El costo de todo el trámite es de 850 pesos, incluyendo el pago de la tarjeta, una diferencia de 650 con el gestor, es decir 56%.
Sin embargo, el cambio de propietario es imposible en las oficinas de recaudación sin la factura endosada a nombre del nuevo dueño, situación que los coyotes resuelven, si es posible, en un mismo día.
Por esta razón, una pareja que esa misma mañana acudió a las oficinas de recaudación, reconoce que hace un año realizó el cambio de dueño a través de un coyote porque el propietario anterior del vehículo se encontraba en Tamaulipas y necesitaban hacer, de manera urgente, el cambio en la titularidad.
En esa ocasión, la pareja acudió con una gestora que conocen como “La China”, que aseguran, resuelve cualquier traba al día siguiente. El trabajo con los coyotes, o como se denominan a sí mismos gestores, es legal de acuerdo con sus clientes. El problema está en que en ocasiones no se tiene el tiempo para resolver los trámites o hay situaciones, como el cambio de residencia de los propietarios, que dificultan la expedición de los documentos.
“La China” es una mujer chaparrita y morena que llega desde las siete de la mañana al auditorio Josefa. Su oficina es una de las entradas del edificio y con ella vienen dos ayudantes. Uno de ellos es una chica joven que pide llevar todos los papeles del vehículo para dar un estimado del costo de los trámites.
—Si no se tiene la factura endosada, vemos si buscamos al dueño o qué hacemos. De que sale, sale, asegura, mientras me extiende una tarjeta donde promociona los siguientes servicios: facturas testimoniales, emplacamiento de vehículos americanos y nacionales, refrendos, placas, bajas, legalizaciones, tenencias, multas, altas y cambios de propietarios. En la tarjeta, color rosa, resalta el nombre: Gestoría Maru “La China”.
—Si quiero emplacar un vehículo americano modelo 2005, marca Chevrolet y tipo pick up, ¿Qué necesito?, preguntó a la China posteriormente, vía telefónica.
—Necesitas un pedimento, la fecha en la que entró el vehículo al país, la IFE y dos comprobantes de domicilio. Todo el trámite, depende de los documentos que traigas, sale entre 4 y 5 mil pesos.
—En caso de no contar con el pedimento, ¿qué se puede hacer?
—Ahí sí está difícil. Tienes que pensarlo bien, dice mientras baja la voz. El trámite se complica, según me explica, si no cuento con el pedimento que comprueba la legalización del vehículo. Me advierte que en ese caso, sólo me puede emplacar la camioneta en el Estado de México y no en Querétaro, con el peligro de que me detenga la Fiscalía o la “Procu”.
