El municipio de San Juan del Río enfrenta 35 nuevas demandas por despidos injustificados que se suman a otros 25 juicios pendientes de la pasada y presente administración, informó el regidor síndico, Rafael Camacho, quien descartó la indemnización al 100% para quienes promueven estos 60 asuntos laborales.
Si bien, la pasada administración quedaron pendientes 67 juicios laborales de los cuales fueron resueltos 37 mediante conciliaciones.
Otros tres casos fueron resueltos luego de la resolución emitida por el Tribunal de Conciliación y Arbitraje en contra del municipio y por los cuales se debieron pagar indemnizaciones por concepto de salarios caídos por un monto aproximado de dos millones de pesos, agregó el síndico municipal.
“Eran asuntos de administraciones pasadas que estaban rezagados desde 2006, pero con la buena voluntad de estas administración, y respetando siempre el derecho de cada uno de los ex trabajadores, se pudo conciliar con 40 de ellos y quedaron sólo 27 demandas pendientes de pasados periodo de gobierno”, aseguró.
En lo que va de la presente administración se han dado de baja a 150 trabajadores por cuyos despidos derivaron 35 nuevas demandas laborales que se suman a las ya vigentes; al resto de los trabajadores se les entregó un finiquito por lo cual el municipio erogó un recurso de ocho millones de pesos.
El funcionario municipal dijo que a pesar de que por los despidos generados en esta administración surgieron 35 juicios laborales, las bajas de los ex trabajadores está justificada por lo que desestimó que el municipio esté en condiciones que pagar las indemnizaciones que están demandando.
“Desgraciadamente se han presentado nuevas demandas por despidos llevados a cabo en el actual periodo de gobierno. Nosotros somos respetuosos de los derechos de los trabajadores pero de ninguna manera se van a estar pagando las indemnizaciones que están demandando porque los despidos de estas personas están justificados” insistió el regidor.
Agregó que otro de los motivos por los cuales la administración ha recurrido a los despidos fue con la intensión de recortar el presupuesto a la nómina, a fin de sanear las finanzas municipales. “Es un compromiso de la administración municipal el seguir haciendo un análisis de la nómina y de sus gastos; es un compromiso de este gobierno el reducir la nómina y que para la siguiente administración no se entregue una nómina inflada”, reiteró.
Agregó que el compromiso de la presente administración es reducir en la medida de lo posible el número de demandas laborales por despidos injustificados buscando que los asuntos vigentes se resuelvan de mutuo acuerdo para que el municipio no tenga que erogar cuantiosas sumas de dinero por salarios caídos y otras indemnizaciones.
Para atender las demandas laborales interpuestas contra del municipio, se autorizó poder especial a licenciados que estarán a cargo.