En el marco del Día Mundial de la Artritis, que se conmemora este 12 de octubre, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado promueve entre los derechohabientes su detección y control oportuno.
Recibir tratamiento en los primeros seis meses de iniciada la sintomatología en pacientes con artritis reumatoide puede lograr que, de 100 % de pacientes, 70% pueden remitir la enfermedad, es decir, evitar daño estructural en las articulaciones, mantenerlos libres de signos y síntomas con un tratamiento convencional.
Cuando el tratamiento se inicia en fases avanzadas, 30% de los enfermos aumenta el riesgo de secuelas de deformidades y discapacidad en los primeros dos años de establecida la patología; por eso es importante el diagnóstico en fase inicial.
La doctora María Vanessa Gordillo, jefa del Servicio de Reumatología del Hospital General Querétaro, alertó a los que padecen esta enfermedad, a no caer en la trampa de los productos [cortisonas] y terapias “milagro”, pues ocasionan un retraso en el inicio del procedimiento médico especializado.
El trabajo en el área de enfermedades inflamatorias [reumatología], desde hace siete años, explicó ha logrado un avance importante para la población queretana, con el apoyo de nuevos fármacos que permiten disminuir la discapacidad e impactar para bien en la calidad de vida”, detalló.
En ese aspecto, hizo una invitación a los sectores de salud para que los médicos de primer contacto aprendan a considerar la sintomatología y las características del cuadro clínico de los pacientes, diferenciar el dolor inflamatorio al dolor mecánico y, en cuanto detecten dolor inflamatorio persistente, referirlos con un especialista para descartar o confirmar el diagnóstico de artritis reumatoide mediante estudios de laboratorio específicos.
En virtud de que es una enfermedad sistémica, puede afectar a muchos órganos del cuerpo además de las articulaciones tales como piel, ojos, corazón, sistema nervioso, pulmones, sangre y aparato músculo-esquelético; de ahí la importancia de su diagnóstico temprano y el acceso a tratamientos, resaltó la especialista.
Destacó que la artritis reumatoide es una enfermedad incapacitante debido al dolor súbito o progresivo que experimenta el paciente afectado en las articulaciones, seguido de un proceso inflamatorio potencialmente incapacitante, que afecta a un hombre por cada tres mujeres, es decir, aqueja mayormente a las mujeres.
Se trata, dijo la especialista, de un padecimiento crónico, autoinmune, sistémico, para el cual no existe cura, pero sí tratamientos farmacológicos que, iniciados en fase temprana, pueden mejorar el pronóstico y la calidad de vida de los enfermos.
En México existen un millón 500 mil personas que padecen artritis reumatoide y, de acuerdo al informe del Hospital del ISSSTE, 7 de cada 10 son mujeres, informó Gordillo.