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Agustín Morales Rangel, de 70 años de edad, perdió la vida al ser sepultado por varias toneladas de escombros, cuando se encontraba en el patio trasero de su casa y la barda de una construcción aledaña colapsó repentinamente encima de la vivienda de la víctima.
A pesar de los trabajos realizados por los cuerpos de emergencia que se dieron cita en el lugar del percance, nada se pudo hacer para localizar con vida al desafortunado hombre, quien murió instantemente.
Fue en la casa marcada con el número 224 de la calle Hércules, en la colonia del mismo nombre, donde cerca de la 1 de la tarde de este jueves, la barda de aproximadamente 8 metros de altura que había sido construida en el predio aledaño y perteneciente a una construcción donde se piensa establecer una gasolinera, se vino abajo y cayó encima de un par de cuartos de lámina donde el adulto mayor tenía un pequeño taller de herrería y donde tomaba un descanso debajo de un árbol de limones.
De acuerdo con versiones de algunos trabajadores de la obra, todo se originó luego de que la pared lateral de la construcción comenzó a desmoronarse y grandes secciones de piedra, tabique y tepetate, cayeron sobre la casa de Agustín, sin que pudieran hacer algo para evitarlo.
Ante esta situación, algunos de los trabajadores y varios vecinos de la zona, corrieron hacía el sitio del derrumbe, descubriendo una escena de total incertidumbre, pues desconocían si alguien se encontraba debajo de los escombros, por lo que alarmados dieron aviso a los cuerpos de rescate y a las autoridades correspondientes.
Al lugar acudió el agente del Ministerio Público, quien en compañía de elementos de la Dirección de Servicios Periciales, iniciaron con los trabajos correspondientes y ordenaron la extracción del cadáver, para ser trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense.
