Para disminuir las manifestaciones de violencia y sus efectos, se debe incentivar la participación ciudadana, consideró el investigador de la UAQ, Raúl Martínez Merling, quien realiza trabajos orientados al impacto de la violencia en el país.
“Lo más importante es la participación ciudadana en todas sus vertientes; los ciudadanos están ahí, con disposición, solo hay que trabajar con ellos”, apuntó.
Añadió que las autoridades queretanas necesitan informar la verdadera problemática de la violencia en la entidad, ya que, aseguró, la semana pasada la Policía Federal dio a conocer que en Querétaro se habían establecido tres cárteles: Los Caballeros Templarios, La Familia Michoacana y el Cártel de Sinaloa.
“En el último dato que tenemos de la semana pasada, tomando como fuente a la Policía Federal, se menciona que hay presencia de cárteles en el estado; el secretario de Gobierno estatal mencionó que no había, sin embargo la fuente real nos menciona la presencia de tres cárteles”, refirió el investigador.
Martínez Merling comentó que blindar el estado coloca a las autoridades de seguridad en una zona de vulnerabilidad para caer en actos de corrupción, y con ello incrementar las condiciones inseguras.
“El gobierno del estado tendría que motivar la participación de los ciudadanos en el sentido de qué hacer frente al acoso de la violencia social, hay muestras de mujeres levantadas, migrantes desaparecidos, secuestros, laboratorios de procesamiento de narcóticos; todos estos son una muestra de los riesgos que tiene el estado”, mencionó.
Expresó que de acuerdo con datos de un estudio realizado sobre la participación de los ciudadanos para combatir la violencia, de mil 100 encuestas, revelan que 80% de los ciudadanos mostraron interés en tomar acciones contra el fenómeno, sin embargo, al estar desorientados, requieren guía del gobierno en la planificación de estas medidas.
Martínez Merling mencionó que en el trabajo de campo que se realizó, se tuvo como resultado que la gente de un nivel socioeconómico bajo, manifestó su disposición de participar en el combate a la delincuencia para eliminar la violencia.
“Platicamos con la gente y vemos la disposición, incluso la gente humilde nos dice: bueno sí queremos participar para mejorar nuestra seguridad, ¿con cuánto cooperamos?; ahí se encuentra una muestra de benevolencia”, indicó el investigador.