Vendedores de productos de temporada, adheridos a la Unión de Comerciantes de Fiestas Tradicionales, dejaron de operar por un año, luego de que las autoridades les impidieran establecer sus puestos en el centro del municipio de San Juan del Río, señaló la representante de la agrupación, Ana Cortés.
La líder de comerciantes afirmó que solicitarán permiso para volver operar en el primer cuadro de la ciudad.
Ana Cortés explicó que cada agremiado invierte en promedio 20 mil pesos para adquirir mercancías alusivas a las diferentes fiestas tradicionales, mientras que las ganancias regulares son de entre 5 mil y 6 mil pesos por cada temporada de venta.
Desde octubre de 2015, a la agrupación, igual que a miembros de la Unión de Comerciantes 2 de Noviembre, se le impidió establecerse en los jardines del centro de San Juan del Río.
El municipio ofreció como zonas para reubicarlos dos cajones de estacionamiento y un predio que se ubica en la calle Artículo 3, sitios fuera del primer cuadro.
Los comerciantes semifijos, rechazaron la propuesta de reubicación por considerar que no serían benéfico para las ventas y, al no llegar a un acuerdo de una zona factible para establecerse, dejaron de operar desde el mes de octubre del año pasado.
La representante de los vendedores de fiestas tradicionales explicó que el gremio cuenta con permisos para operar durante nueve temporadas del año, relacionadas con festejos como en Día de Muertos, Navidad, Día de Reyes, el 2 de febrero, entre otros.
Esta agrupación concentra a 145 comerciantes semifijos, pero cada temporada operan sólo 30 en promedio.