Javier es un joven que escribió el lema que acompaña a quienes tienen que enfrentar el cáncer, lo que definió como una “lucha que se pelea a ciegas, pero nunca solos”; él fue paciente de cáncer y ahora ya se ha recuperado.

Un caso similar es el de Gaby, una joven de 21 años que hace un mes tuvo a su primer hijo, luego de vencer el cáncer: tenía leucemia.

Gabriela cuenta que a los 15 años fue paciente del Hospital de Especialidad del Niño y la Mujer: “Ingresé a urgencias con un cuadro de anemia severa, ese día fue muy triste para mí, estar esperando que me hicieran un estudio para saber mi diagnóstico.

“Me realizaron un procedimiento muy doloroso, a partir de ese momento mi vida cambió por completo, el resultado: leucemia linfoblástica aguda. Dios nos había puesto a mí y a mi familia una gran prueba que habíamos de superarla”.

Tras muchos meses de luchar, de someterse a tratamientos dolorosos, de perder su cabello, logró recuperarse; en el camino, una de sus amigas, también enferma, murió, pero dejó en ella grandes aprendizajes sobre el valor de la vida y la importancia de luchar.

Gabriela participó en la ceremonia que personal del Hospital del Niño y la Mujer, que cuenta con área de Oncología, realizó para reconocer la lucha que día a día los menores enfrentan.

La enfermedad pudo afrontarla al lado de su novio, quien hoy es su esposo y con quien ha logrado iniciar una familia. “Tuvimos el 16 de enero un bebé que nació muy sano y fuerte, (…) aquellos momentos tristes y duros... vino a alegrarme la vida mi bebé, es un gran regalo a todo aquel sufrimiento y para quienes están pasando por esta enfermedad, les deseo lo mejor”.

Este 15 de febrero se conmemora el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer Infantil, una de las principales causas de muerte entre los menores de 18 años que se ven afectados por leucemias.

Las estadísticas en México hablan de que cada 4 horas muere un niño a causa de cáncer, es decir, cada año fallecen 2 mil 200 menores; el cáncer más frecuente en la edad pediátrica es la leucemia aguda linfoblástica, seguido de linfomas y tumores del sistema nervioso central. En Querétaro se atiende a cerca de 200 menores con alguna de estos.

Expertos indican que existen acciones médicas oportunas que pueden hacer la diferencia entre la vida o muerte de los niños.

Google News

TEMAS RELACIONADOS