La noche del lunes y parte de este martes los cuatro tanques de coque permanecieron estacionadas en la comunidad de La Trinidad en Tequisquiapan. Su paso por este municipio fue posible mediante un camino de terracería que conecta a por lo menos tres localidades y que los habitantes piden sea pavimentado.
Gerardo Moreno Uribe, ejidatario de Tequisquiapan, explicó que la vialidad conocida como El Pedreño constituyó el camino real de la zona que comunica a la carretera 120 con la carretera 200, que conduce hacia Colón.
Esta vialidad atraviesa las localidades de La Trinidad, El Carrizal, Fuentezuelas y La Laja, y, de acuerdo con el ejidatario, permitiría agilizar el acceso hacia Colón para quienes vienen de San Juan del Río
Fueron los ejidatarios quienes invirtieron recursos para ampliar el camino y poder tener un fácil acceso a las zonas de cultivos; sin embargo, durante varios años han solicitado el apoyo de gobiernos locales para que se pueda pavimentar. Ahora esperan que la presencia de las calderas de coque ocasione que las autoridades volteen a ver a la localidad y valoren el beneficio de conectividad que traería la mejora de esta vía.
Para la llegada de las calderas, personal de la empresa responsable de su traslado acudió de manera previa a la localidad de Tequisquiapan para realizar trabajos de mejora en el camino de acceso y retiro de maleza que pudiera obstruir la circulación. Esta es la primera vez en muchos años que los ejidatarios testifican el arreglo de la vialidad por un sector ajeno al productivo.
“Nosotros como ejidatarios hemos cooperado. La carretera no está mal porque le hemos colocado tepetate, pero nos favorecería mucho que las autoridades continuaran con el arreglo de esta vialidad, por la que pasan muchos vehículos de carga pesada, camiones que traen servicios y alimentos a las localidades. Es de mucha utilidad”, aseguran.
Consideraron que a partir de este camino se puede crear un libramiento de doble sentido que pueda conectar a Tequisquiapan con Colón sin atravesar la cabecera municipal.
Curiosos y vendedores rodean las calderas. Desde la noche del lunes y en el transcurso del martes, cientos de personas acudieron a la localidad para conocer las enormes calderas.
En el lugar, vendedores de paletas y nieves aprovecharon la afluencia de curiosos para ofrecer sus productos, cobijados bajo la sobra de los tanques, como don Santos Saucedo Hernández, habitante de la zona, quien aseguró tener un favorable día de ventas.
Don Santos acude regularmente a la zona de parcelas para ofrecer sus paletas a los campesinos y que puedan refrescar su larga jornada laboral. El lunes le avisaron que llegarían las calderas, que estaban enormes y que en cada sitio donde las estacionaban acudían numerosas personas a conocerlas. Pensó que quizá podría vender paletas no sólo a los campesinos, también a los curiosos.
Su presentimiento fue acertado. Desde temprana hora familias completas de la comunidad se acercaron al camino de terracería para conocer los tanques de coque y tomarse una foto para el recuerdo.
Para este miércoles, la actividad en Fuentezuelas se normalizará, los clientes de don Santos se reducirán a una docena de campesinos y niños de la localidad.
Los ejidatarios de Tequisquiapan esperan que por lo menos el uso que se le dio al camino de terracería, para trasladar las calderas, sea un pretexto para que las autoridades reconozcan la importancia de la vialidad y le den mantenimiento, al igual que a otras carreteras empleadas para evitar que los tanques circularan por la cabecera y ocasionaran daños.
En las comunidades de Bordo Blanco y San Nicolás fueron retirados dos puentes peatonales para la circulación de las calderas. La empresa Pesado Transport se comprometió a reinstalar las estructuras en las 12 horas siguientes al paso del convoy.
Las calderas pasarán este miércoles por San Juan del Río y este mismo día se prevé que ingresen a la autopista México-Querétaro.
Se buscará un sitio adecuado a un costado de la carretera para que los tanques sean estacionados, y reanuden su circulación por la noche.