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En Las Menchacas reina la inseguridad, la falta de transporte y el silencio de los agraviados, pues todos los habitantes de estas colonias temen las represalias de los delincuentes, denuncia Ofelia, quien por temor pidió que se le cambiara el nombre.
“Menchaca no era así”, recuerda esta mujer de más de 40 años viviendo en la colonia Menchaca II.
Cuenta que las década de los 70, y aun de los 80, eran muy diferente sen ese barrio tan popular; el crecimiento de la mancha urbana aún no absorbía la zona nororiente de la capital queretana; sus tres hijos podían jugar en las calles, convivir con los vecinos y disfrutar de un lugar tranquilo.
Ahora los robos son a plena luz del día porque los delincuentes se encuentran en una zona de comfort.
Cuando sus hijos comenzaron a crecer y la inseguridad no era tan aterradora ella realizaba denuncias; a cambio, sufrió represalias: grafittis en su casa, asaltos e inclusive llegaron a golpear a su hijo mayor.
Ofelia refiere que el punto más peligroso es en Río Yaqui, esquina con Río Zuchate, pues ahí se reúne El Titino, quien en varias ocasiones ha estado en prisión y a quien los vecinos le atribuyen homicidios. Sin embargo, al salir de la cárcel vuelve a hacer de Menchaca su barrio.
“Hay gente que vende droga en la misma calle. Los tenemos ubicados, pero por miedo no habla la gente. A mi esposo lo han correteado los vagos; ya están bien identificados, sabemos dónde se esconden, hasta sus mamás les andan tapando cuando llega a venir la patrulla por ellos, los meten a sus casas y como si nada”, asegura.
Destaca que sus hijos mayores han preferido ir a vivir a otras colonias por temor. Pero a Ofelia aún le resta una hija pequeña y su marido; ellos tienen que seguir enfrentando la realidad que azota a Menchaca, donde “los camiones… ni se paran”.
La mujer carga una rosa que le dieron al llegar al evento del gobernador y el alcalde, quienes anunciaron una inversión de 100 millones para esta zona. Ofelia sólo se limita a decir: “Ojalá sea cierto”. Dice estar preocupada por las personas que dieron su testimonio para el video que se presentó en el acto protocolario. “A ver si no hay represalias”, dice antes de retirarse.
