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Comerciantes provenientes de Querétaro, del Estado de México e Hidalgo acompañarán a en su peregrinar a los fieles católicos, esto hasta el Templo del Tepeyac, para obtener de ellos, un sustento económico, durante los próximos ocho días.
Los productos que más se comercian durante el viaje son plásticos (que los peregrinos colocan sobre la tierra para descansar o dormir, además de extenderlo debajo de sus bolsas, para que el rocío de la mañana no moje sus cobijas y ropa), rosarios, paliacates, tamales y atole.
En promedio una persona que vende plásticos, al día comercia 80 de estos impermeables, los cuales los ofrece en 20 pesos; mientras que los comerciantes de tamales y atole, venden sus productos en 10 pesos cada uno, en promedio, las personas que ofrecen este tipo de comida preparan al día 4 mil tamales y mil litros de atole de chocolate.
Araceli Hernández Maldonado —habitante de la comunidad de Miranda, en el municipio de El Marqués— dijo que por ahora preparan 4 mil tamales al día, pero conforme aumente la columna de personas el número de tamales, también, lo irán haciendo.
“Nosotros los acompañamos durante toda la peregrinación, gastamos alrededor de 4 mil pesos por la elaboración de todos los tamales, y al final del día obtenemos una ganancia de mil 500 a 2 mil pesos”, indicó la ambulante.
Mientras que los rosarios se encuentra entre los 20 y 70 pesos; y los paliacates con la imagen de la virgen de Guadalupe de 10 a 15 pesos.
Es de señalar que los comerciantes ambulantes para vender sus productos entre los caminantes deben de contar con un permiso que emite la Asociación de Peregrinos, el cual tienen un costo de 300 pesos.
En la columna de hombres fueron contabilizados 30 comerciantes que acompañarán durante todo el trayecto a los peregrinos queretanos.
En el despertar y en la celebración de la primera misa del día —a las cuatro de la mañana— los comerciantes no se dejan ver entre los andantes, pero al arribo de los peregrinos en el sitio que corresponde el primer descanso los ambulantes comienzan a ofrecer su mercancía a los andantes ya postrados en el piso por el cansancio.
En su oportunidad, Guillermo Ramírez Fidencio —oriundo del Toluca, Estado de México— explicó que acompañará durante todo el trayecto a los peregrinos que se dirigen al Templo de la Morenita.
“Pues sí, los vamos a acompañar todo el camino, los dejaremos uno tramos pero después los alcanzaremos, yo doy a 10 los paliacates para que se cubran del sol y a 20 las bolsas para que se tapen del agua”, señaló el comerciante.
