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A una semana de la implementación del nuevo número de emergencias en Querétaro, al menos 7% de las llamadas han sido “improcedentes”, dio a conocer el secretario de Seguridad Ciudadana, Juan Marcos Granados Torres, quien puntualizó que aún han recibido llamadas de otras entidades por fallas en el sistema.
Desde que se activó el 911 en Querétaro se ha tenido un aumento en las llamadas que no reportan ninguna emergencia, toda vez que los ciudadanos querían verificar que si estuviera funcionando esta línea de emergencias; sin embargo, de acuerdo con el funcionario estatal las llamadas procedentes disminuyeron porque los ciudadanos comienzan a hacer un uso responsable de este sistema de atención.
Señaló que, al menos en dos casos, llamadas de otras entidades han sido comunicadas a Querétaro, lo cual se debe a que aún persisten problemas en el sistema de intercomunicación, pues cabe recordar que este número ya es vigente en todo el país; dicha situación fue reportada de inmediato ante la Comisión Nacional de Información y se espera que no se repita.
Entre las principales denuncias que se recibieron en esta semana se encuentran eventos de tránsito, denuncias por personas sospechosas que merodean por casas o tiendas de conveniencia. Dichas llamadas solamente son correspondientes al Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C4) de la Policía Estatal.
Por el momento no se puede contabilizar cuántas llamadas y de qué características se han recibido en todo el estado, dijo, pues será hasta fin de mes cuando los municipios entreguen el reporte correspondiente; destacó que al C4 se reportan la menor cantidad de llamadas toda vez que la primera línea de atención es la policía municipal.
“Cuando entra la llamada, el operador está haciendo lo necesario para enviar la unidad que se requiera, las precisiones que hace el operador son mucho muy importantes porque necesitamos saber lo que está pasando. En ese momento que se está capturando la llamada se está despachando a la unidad correspondiente, pero a veces la ciudadanía se desespera”.
