Luis Fernando Becerra Sánchez vive con miedo. En diciembre del año pasado su ex pareja sustrajo a su hijo, de dos años de edad, por 17 días. Tras recuperarlo, la madre del menor y su actual pareja amenazan con volver a llevárselo. Dice que las autoridades actuaron con negligencia, “y como nadie me quiso ayudar decidí buscarlo [al menor] por mi cuenta”.
Pausado al hablar, volteando alrededor como buscando a alguien, Luis Fernando recuerda que la madre de Diego, con quien nunca se casó, se llevó al menor de la casa con engaños, así como algunas propiedades.
“Después de una búsqueda exhaustiva en redes sociales y el apoyo de la gente, me llamaron de San Juan del Río, diciéndome donde se encontraba mi hijo. Estaba en una vecindad de la colonia La Fátima, en San Juan del Río, ahí tenían a mi hijo”, explica.
En el Ministerio Público le dijeron que no podían hacer nada hasta que investigaran el caso; en el Juzgado, que no había guardias, que estaban de vacaciones, y en la Agencia 12 del Ministerio Público, que llevara las facturas de las propiedades robadas. Indica que los hechos ocurrieron el 20 de diciembre de 2015.
Señala que se sintió discriminado cuando le negaron el apoyo, pues se había cometido el delito de sustracción de menor, por el cual la progenitora del hijo de Luis Fernando no ha recibido castigo, ni fue detenida al momento de entregar al bebé.
“Ya son cinco meses que no la detienen, porque las autoridades dicen que están trabajando en eso. Les dije que no había nada que investigar, ella misma lo aceptó, ella misma en sus declaraciones acepta tener las cosas que se robó [de la casa de Becerra Sánchez]. Me vació la casa, desde un cepillo de dientes, hasta la cama. Una casa donde mi hijo tenía todo lo necesario, lo indispensable para vivir”.
Actualmente Becerra Sánchez tiene la custodia provisional de su hijo, ya que su pareja abandonó el hogar familiar, por lo que acudió al juzgado.
“Obviamente no es tan fácil que le den la custodia a un papá, ni siquiera provisional, pero al ver el desinterés de ella y al demostrar que yo tenía a mi hijo bien, que me hacía cargo de él, el juez falló a mi favor”, sostiene.
Precisa que este tipo de juicio es lento y lleva mucho tiempo, aunque espera que le otorguen la custodia permanente, ya que la mamá del menor, comenta, no muestra interés en él; por ejemplo, “le acaban de otorgar las convivencias, y a la primera no fue”.
Detalla que prevalece aún la idea de que sólo las mujeres pueden hacerse cargo de los niños, “pero hay mujeres que no merecen ser mamás. Hay mujeres que abandonan a sus hijos por irse por otra persona”.
Agrega que esa fue la excusa que usó su ex pareja para sustraer a su hijo, ya que acudió a él para que la ayudara, pues el hombre con quien actualmente sostiene una relación la golpeó.
“Ella fue a denunciarlo a la Agencia 4 del Ministerio Público y esa fue su trampa. Ahí aprovecharon para meterse a mi casa y sacar a mi hijo y mis cosas”, explica.
Subraya que vive con temor por las amenazas que recibe por parte de su ex pareja, pues duda que las autoridades lo puedan ayudar “o hagan caso”, ya que con el delito de sustracción del menor tardaron en actuar, en el caso de las intimidaciones que recibe menos actuarán.
“Si no les importa la sustracción de menores, si no les importa el robo de mi casa, menos les va a importar que estoy amenazado. ¿Cómo pienso proceder? Denunciando esta situación, espero que llegue a oídos de alguien esta discriminación, para que puedan apoyarme y hacer su trabajo. No pido que les den cadena perpetua, sólo pido que se haga justicia”, enfatiza.
Acota que pasó 17 días de angustia al no saber nada de su hijo, y eso no se arregla con una disculpa, sólo pide estar tranquilo con su hijo, lo que no puede hacer por las amenazas que hay en su contra.
“Es mi miedo. Es mi día a día. Es estar cuidando en un parque, es estar volteando para todos lados, porque me lo dijeron: te lo vamos a quitar y ahora sí no nos vas a volver a ver”.
Puntualiza que le mandan mensajes y llaman, además de que en los días de convivencias está la actual pareja de la madre de su vástago, afuera, donde apunta las placas de su vehículo y hace llamadas, además de hacer la descripción de cómo va vestido y sus características.
“Hasta ahora no me ha pasado nada, pero es estar amedrentando. Es estar intimidándome, y es algo que no va. Ellos se sienten inmunes”.
Añade que hasta el momento no ha hecho una solicitud de protección, y no ha recibido apoyo de las autoridades, a pesar de que se siente vulnerable ante lo que le toca vivir.
En su oportunidad, Karla Mackenzy, abogada de Luis Fernando, menciona que en la Agencia 4 del Ministerio Público, a donde por lo regular acuden mujeres víctimas de violencia, a él no le están brindando la atención que solicita, “pues cómo es posible que un hombre vaya a poner una queja por la sustracción de un menor, si es su madre, aunque ella no tenga la custodia y está acreditado ante el juez familiar que ella no puede tener al menor”.
Acota que hay una denuncia contra el personal de la Agencia 4 por no darle seguimiento al caso y actuar de manera omisa.