“Yo me creía sano, acababa de jubilarme y fui a la clínica a hacer un trámite; una enfermera dio una plática de diabetes y nos invitó a varias personas a hacernos el estudio de hemoglobina glucosilada. En unos minutos nos entregó los resultados y cual va siendo mi sorpresa, ¡tenía la glucosa disparada!, desde ahí me integré al programa de Manejo Integral de Diabetes por Etapas del ISSSTE y evité un grave desenlace”.
Este es el testimonio de Alonso Tapia Castello, pensionado de 65 años, quien desde mayo pasado se atiende en el módulo MIDE de la Clínica de Medicina Familiar Dr. Ignacio Chávez y al igual que 100 mil derechohabientes diabéticos que asisten a 141 clínicas de primer nivel en el país recibe apoyo multidisciplinario de un equipo de salud para controlar su enfermedad y mejorar su calidad de vida.
En el marco del Día Mundial de la Diabetes —14 de noviembre—, la Subdirección de Prevención y Protección a la Salud destaca que 60% de los derechohabientes que participan en el programa MIDE logran controlar la patología, porcentaje de éxito que no se había obtenido en ninguna institución pública de salud en México y coloca al ISSSTE a la vanguardia.
Bajo el compromiso de mantener un estrecho acercamiento con los derechohabientes del ISSSTE que padecen diabetes, la delegación del ISSSTE en la entidad, a cargo del doctor Sergio Alberto Blanca Álvarez, ha conformado grupos de ayuda mutua en los módulos de MIDE y en la Clínica de Medicina Familiar Querétaro.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 90% de los casos de diabetes son tipo 2 y se relacionan con sobrepeso, obesidad e inactividad física, factores con causa directa en los estilos de vida y dieta inadecuada y, por lo tanto, prevenibles.
No obstante, aún falta mucho por hacer. Estudios de la Federación Internacional de Diabetes estiman que en el mundo cerca de 400 millones de personas viven con esta enfermedad; en México, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012 reportó que nueve de cada 100 adultos tienen el padecimiento, mientras que en el ISSSTE, debido a que registra un envejecimiento más acelerado de su población atendida, 13 de cada 100 son diabéticos.