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En el cruce de Calzada los Arcos y el descenso de Milenio III, un ciclista fue atropellado y trasladado de emergencia al hospital con fractura expuesta en la rodilla derecha, después de que un camión de carga lo arrollara cuando el ciclista salió de un callejón de forma intempestiva y en estado de ebriedad.
El percance tuvo lugar en el cruce de Loma Dorada y el inicio de Calzada los Arcos, cuando Hilde Aguas Martínez salió en su bicicleta, rodada 26, del callejón que se encuentra en la acera del lado norte de la calzada; al estar consumiendo una botella de aguardiente de caña no vio al camión que descendía de Paseo Fundadores.
El conductor del torton indicó que trató de evitar golpear al ciclista, pero a pesar de pisar con fuerza el pedal de los frenos, la pesada unidad no logró detener su marcha y el impacto se recibió en la llanta delantera de la bicicleta, lo que ocasionó que el ciclista cayera y una de las llantas alcanzara a lesionar al ciclista.
“Nada más escuchamos el chillido de las llantas del camión, y vimos cómo el chavo de la bici cayó y empezó a gritar del dolor, corrimos para ayudarle pero estaba tan borrachito que se quería levantar, fue cuando llegaron los policías y llamaron a la ambulancia” explicó lo sucedido Mayra Gómez quien pasaba por el lugar cuando ocurrió el accidente.
Al lugar acudieron elementos de la policía municipal y una ambulancia de la Cruz Roja. Los paramédicos se encargaron de estabilizar al lesionado que por la gravedad de sus heridas fue trasladado de emergencia al Hospital General con una fractura expuesta en la pierna derecha.
Francisco Reséndiz, conductor del torton, fue trasladado a la agencia especializada en hechos de tránsito, para rendir declaración de lo ocurrido; en tanto que su unidad de trabajo fue trasladada al corralón.
Los elementos de la policía municipal, que tomaron conocimiento del incidente, pasaron la información al oficial de la Policía Estatal, quien remitió al responsable al Ministerio Público.
En el suelo se podía observar la bicicleta, una mancha de sangre del ciclista y la botella de aguardiente aún sin terminar. La bicicleta también fue remitida al corralón y el propietario de la misma podrá sacarla después de salir del Hospital General.
