Debido a que presenta una generación robusta de ahorro interno que le permite contar con un flujo libre para realizar proyectos de inversión, Fitch Ratings mejoró la calificación de riesgo crediticio al gobierno municipal de El Marqués.
La calificación de El Marqués se encontraba en A(mex) y pasó a A+(mex), con perspectiva positiva.
La perspectiva positiva de la calificación refleja la expectativa de desempeños presupuestales sólidos en los próximos años, lo que le permitirá a El Marqués consolidar las tendencias observadas en los últimos ejercicios.
Los factores que limitan la calificación son las erogaciones por concepto de servicios personales per cápita; los niveles de inversión respecto al gasto total están por debajo del grupo de municipios calificados por Fitch (GMF) y de pares en la misma categoría de calificación. Además de que presenta una falta de un mecanismo institucional de seguridad social (incluyendo pensiones), lo que representa una contingencia en el largo plazo para las finanzas municipales.
Entre los factores que fundamentan la calificación destacan la recaudación local sobresaliente con niveles destacables de ingresos propios con respecto a los ingresos totales (superior a la mediana del GMF).
También la evaluación considera el nivel de apalancamiento nulo y la posición de liquidez adecuada que se caracteriza por un manejo prudente del efectivo disponible. Además, El Marqués se localiza en una región económicamente activa y dinámica en sectores ligados a la actividad manufacturera e industrial.
El desempeño financiero de El Marqués se considera fuerte con tendencia estable. Al cierre de 2017, los ingresos fiscales ordinarios (IFOs, ingresos de libre destinación) por mil 225.0 millones pesos, cifra mayor en 25.5% con respecto a 2016.
Los ingresos fiscales ordinarios presentan una tasa media anual de crecimiento para el período de análisis 2013 a 2017 de 18.8%. Lo anterior es consecuencia de un dinamismo inmobiliario (residencial e industrial) que se materializó en 2013 y que se estima continúe en los próximos años.
El municipio compara muy favorablemente en términos de su proporción de ingresos propios a totales (65.6% en 2017; mientras que el promedio de GMF es 25.1).
Cabe señalar que en 2017 la recaudación del impuesto predial tuvo un incremento significativo de 43.5% derivado de las estrategias de recaudación para disminuir el rezago y cartera vencida en este rubro.
La generación constante de ahorro interno derivó en balances financieros superavitarios desde 2013. El balance fiscal representa 16.1% de los ingresos totales.
Fitch estima que la flexibilidad financiera de la entidad se consolidará y se mantendrá fuerte como consecuencia del dinamismo económico de la región del Bajío, a pesar de los requerimientos mayores de inversión y de servicios públicos.
En términos de la inversión, al cierre 2017 ésta fue de 161.2 millones de pesos, monto que casi se duplica con respecto a 2016 y representó 15.7% del gasto total.
El Marqués no cuenta con créditos bancarios de corto plazo ni hace uso de esquemas de factoraje o de cadenas productivas.
La política de la administración actual es de ‘cero adeudos’ para con proveedores y acreedores. La rotación del pasivo circulante se ubica en 30 días con respecto al gasto primario; este pasivo representó 7.0% de los ingresos fiscales ordinario al cierre 2017.
Respecto a la posición de liquidez, el municipio refleja un saldo de caja destacable, equivalente a 31.7% de los ingresos totales en 2017.
Con respecto a contingencias en el largo plazo, el gasto por seguridad social (incluyendo pensiones y jubilaciones) es cubierto a través de gasto corriente. Al cierre de 2017 este monto representó 1.0% de los ingresos ordinarios y se ubicó en 11.7 millones de pesos.
El Marqués contaba con mil 779 empleados activos y 67 jubilados; el año de suficiencia es hasta 2047. A pesar de que dichos egresos son manejables, el no contar con un sistema formal encargado de dichas erogaciones denota contingencia a largo plazo que podría.