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Derivado de 163 decomisos realizados por la Dirección de Inspección en lugares como misceláneas, fiestas clandestinas y campos de futbol desde 2010, este martes se procedió a la destrucción de 30 mil litros de bebidas alcohólicas como cerveza, vino, entre otras. El vidrio y el aluminio de los envaces se va a rescatar para su reciclaje, informó Fernando Goyeneche, titular de esta dirección.
Lo decomisado se ha acumulado a lo largo de 2010, 2011 y 2012, mientras que en lo que va de la presente administración se han realizado cuatro aseguramientos en fiestas clandestinas, comentó Goyeneche.
De estos cuatro decomisos, detalló, dos se realizaron en el Casino Leonistico y en otras dos fiestas en la zona de Jardines de la Hacienda. “Es muy poco, la verdad, lo que nosotros hemos decomisado, hemos hecho cuatro decomisos”, mencionó.
Por su parte, el secretario general de Gobierno, Mauricio Ortiz, comentó que el decomiso y la destrucción de alcohol es un logro realizado por los funcionarios municipales. Sin embargo, para incrementar el número de acciones, en los siguientes días se van a integrar 15 nuevos inspectores.
“Este es un reconocimiento al trabajo que realiza la administración municipal, porque una buena parte de este decomiso se llevó a cabo en meses pasados, incluso antes de que nosotros iniciáramos funciones en la administración”, precisó.
Señaló que la administración municipal tiene el compromiso de combatir la venta irregular de bebidas alcohólicas y el mal uso que se le pueda dar a las mismas. “Nosotros la combatimos; vamos a tener una incorporación de nuevos elementos a la Dirección de Inspección, lo que nos va a permitir tener a más personas en el combate al fenómeno”, expresó.
Ortiz Proal señaló que las nuevas acciones se van a realizar de manera directa a la ingesta de bebidas alcohólicas, ya que se han detectado misceláneas que se han convertido en “bares públicos”, al dejar tomar a las afueras de su establecimiento estas bebidas a sus clientes.
Esta problemática ha sido detectada por las autoridades municipales luego de la molestia de los vecinos, quienes han referido diversos lugares donde se puede observa a personas que toman alcohol en la vía pública.
El alcohol decomisado es llevado al relleno sanitario de Mompaní. Ya en este sitio, se colocan las botellas en el relleno y luego son aplastadas con una maquina tipo tractor para que el líquido sea absorbido por la composta del relleno, un proceso que puede demorar hasta dos meses. Después, vidrio y aluminio son reciclados, precisó Goyeneche.
