Al son de música de mariachi y banda norteña, cientos de queretanos disfrutaron de la ya tradicional muestra gastronómica de barbacoa y nieve, que se realizó en el parque Bicentenario de la delegación capitalina Cayetano Rubio, en la popular colonia Hércules.
Los vendedores de barbacoa fueron los primeros en llegar al lugar, desde las 7:30 de la mañana, hora en que comenzaron a preparar todo lo necesario para dar la atención merecida a los queretanos que acudieron para degustar algunas de las mejores barbacoas, consomés, montalayos, morongas y helados de diversos sabores que se comercializan en la capital.
Ya a las ocho de la mañana comenzaron a llegar los primeros comensales, quienes celebraron ser los que dieron apertura al evento, que se inauguró de manera oficial cerca de las nueve horas con la participación de mariachis, seguidos de una banda norteña y luego grupos de bailes típicos mexicanos, con los que el festival se tornó muy folclórico.
En medio de un ambiente meramente familiar, cerca de 15 puestos de barbacoa y otros más de nieve ofrecieron a los asistentes inmensa variedad de sabores, que culminó cerca de las tres de la tarde, cuando los borregos sacrificados fueron consumidos en su totalidad.
“Deberían de hacer más ferias de estas, yo me he fijado que los queretanos somos muy aficionados de las carnitas y la barbacoa y luego andamos asistiendo a otras ferias que se hacen en otros lugares, cuando la barbacoa que se produce en el estado yo diría que es una de las más ricas”, consideró Brenda Gutiérrez, quien asistió a la muestra acompañada de su esposo e hijos.
Con ella coincidieron decenas de asistentes, quienes celebraron poder degustar una muestra de este tipo dentro de la propia capital queretana.
“Además de todo, la idea de la música en vivo está muy padre, uno se siente más en ambiente y da más hambre, creo. Yo supe de la feria desde la semana pasada, y ya había planeado venir con mi esposa y mis suegros, porque a todos nos gusta mucho la barbacoa”, aseguró Ernesto Retana, comensal.
Los últimos en dar gusto a los presentes fueron los tradicionales neveros de Hércules, famosos en todo el estado por la calidad de sus productos, que no ofertaron hasta cerca de las 10:30 de la mañana, cuando el fresco de la mañana comenzaba a quedar de lado.