En Querétaro se estima que hay 28 mil niños que trabajan, y muchos son menores de 14 años que realizan alguna actividad de remuneración económica, informó el delegado del Trabajo en el estado, Gerardo Vázquez Mellado Zolezzi.
Son menores que se ubican principalmente en actividades como el campo, el comercio y en la calle, y que evidentemente realizan una práctica que está fuera de la ley, por la que los adultos responsables deben ser sancionados.
El delegado afirmó que por cada peso que los niños trabajadores ganan se pierden 10 pesos en la vida adulta productiva, pues son menores que se quedan, en su mayoría, sin la oportunidad estudiar.
Para erradicar esta práctica, dijo que se montó una mesa de trabajo con los líderes de las cámaras empresariales y algunos sindicatos a fin de que eviten estas irregularidades entre sus afiliados.
“Los niños tienen que prepararse para que cuando sean mayores tengan un trabajo digno y bien remunerado, un trabajo formal. Es lamentable y estamos siendo muy severos con quienes contratan niños, me refiero a niños de 13, 14 años”, dijo.
A nivel nacional, recordó, por decreto se fijó la edad mínima para laborar en 15 años, cuando anteriormente era de 14, a fin de erradicar esta práctica.
“El Presidente elevó la edad mínima (…) para erradicar el trabajo infantil, es un reto muy ambicioso”.
La meta nacional para disminuir el trabajo infantil es de 30% como un primer paso. Así también, se llevan a cabo operativos principalmente en zonas agrícolas. “La meta de la Secretaría del Trabajo es reducirlo en un 30% en cada entidad del país; con estos programas y sensibilizaciones lo vamos a lograr”, aseguró el delegado.
En caso de detectar esta práctica se procederá a la aplicación de una sanción o la clausura. “Ya tengo el operativo para agro-parques, ranchos; el tema agrícola será con todo el rigor de la ley si detectamos, y en todo caso clausura, es muy ambicioso el plan”, añadió.
Otra medida de la delegación de la Secretaría del Trabajo es lanzar un distintivo de calidad en donde se reconozca a las empresas agrícolas como libres de trabajo infantil.
Según informó el funcionario, es en el campo donde esta práctica es más común, por la necesidad de las familias y por la facilidad que tiene los empresarios de acceder a esta mano de obra que resulta muy barata.