A partir del arranque de la nueva administración municipal de Querétaro se creó la Secretaría de Movilidad, que tiene como titular a Mauricio Cobo Urquiza. El funcionario habla sobre los retos de esta nueva dependencia ante la necesidad de que, desde el municipio, se fijen bases de movilidad.

¿Cuáles son los principales retos de esta secretaría?

—Los retos más importantes diría que son tres: dos en un sentido muy práctico y uno en una cuestión muy profunda de conciencia. Los muy prácticos son compromisos de Marcos: la construcción de 100 kilómetros de ciclovías es un reto mayúsculo, y el transporte escolar, generar un sistema para las primarias y secundarias, son nuestros proyectos insignia.

Platícanos de las ciclovías, ¿cómo distribuirlas en la capital de manera que sean funcionales?

—Hacer una red de ciclovías, una red de carriles para bicicletas que sea funcional es un reto importante, por eso una de las primeras cosas que vamos hacer es el Plan Maestro de Movilidad, son varios entregables, y esto que preguntas seguramente es el entregable más importante del plan. El diseño de la red es como si estuviéramos diseñando rutas, se van a hacer encuestas de origen-destino, como las que se hacen para conformar las rutas de transporte público.

Se busca generar conciencia. Éste es un tema no sólo para las ciclovías, sino en general. La secretaría va a generar procesos de cocreación, quiere que las obras que se desprendan tengan un proceso que es que se haga junto con la ciudadanía.

Tenemos la misión de invertir la pirámide de movilidad. La tendencia actual fomenta el uso de transporte privado. Al invertir la pirámide queremos generar conciencia de que los peatones, la bicicleta y el transporte público son muy importantes para el municipio y eso se tiene que generar.

¿Abrir los espacios?

—Nos damos cuenta que las ciclovías no existen, las banquetas son muy pequeñas y que el vehículo ocupa prácticamente todo el arroyo. Estamos planteando que tenemos que darnos cuenta como sociedad que los peatones y las bicicletas son parte también de nuestra familia, debemos tener la conciencia de que el espacio público debe ser para todas las modalidades de transporte que existen.

¿Se ha complicado el reto para la capital respecto a la amplitud de las calles?

—Evidentemente no todas las vías para bicicletas van a ser del mismo tipo, estamos pensando que sean tres tipos de vías. Habrá zonas en que el arroyo tendrá que ser compartido entre vehículo y bicicleta con nuevas normas de señalización, hay otro que tiene que ver con una segregación de carril para bicicleta, hay reglas internacionales que debemos seguir y habrá vialidad en donde la ciclovía vaya a la misma altura de la banqueta.

¿Este plan estaría en pláticas con municipios conurbados?

—Evidentemente, es una apreciación personal que en las encuestas de origen-destino pueden salir, hasta que no tengamos el estudio y vayamos definiendo la red podríamos proponer alguna ciclovía intermunicipal. De momento pienso que hay tres zonas que pudieran requerir las ciclovías: la zona Centro, Satélite y de manera preliminar pensamos que debe haber conexión entre Jurica-Juriquilla y Santa Rosa Jáuregui.

Buscamos promover que cada quien tenga su espacio, lo que estamos visualizando es que cada modelo de transporte tenga un espacio diferenciado, éste es un concepto que se llama “calle completa”, que es la que tiene un espacio para cada modo de transporte.

¿Cuándo se presenta el Plan de Movilidad?

—Estamos en la parte técnica, hacia mediados de noviembre podríamos tener la empresa y son plazos que pudieran durar seis meses para terminarse, con entregas parciales; queremos que se empiece a finales del mes de noviembre, para tener las dos primeras semanas de diciembre para realizar las encuestas”.

¿Cuándo podremos ver las ciclovías terminadas?

—El compromiso de los 100 kilómetros de ciclovía es tenerlas para finales de la administración.

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