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De acuerdo con la titular de la Comisión Estatal Contra las Adicciones (Ceca), Rebeca Mendoza, de 10 pacientes que se internan en algún centro de rehabilitación en el estado —para combatir su adicción a las drogas o al alcohol— únicamente dos logran rehabilitarse. Mientras que los ocho restantes deciden abandonar el tratamiento a mitad de camio debido a cuestiones que van desde lo económico, hasta porque no pueden estar sin la sustancia en su cuerpo.
Comentó que de manera mensual el Ceca tiene la obligación de realizar censos en los 60 centros de rehabilitación que tiene la entidad, a fin de contar con una cifra veraz que indique realmente cuantos son los pacientes que terminan un tratamiento. A la fecha son mil 513 pacientes los que se encuentran tomando tratamientos.
“Hacemos este censo mensualmente porque hay pacientes que desisten ya que desafortunadamente de cada 10 que se interna uno o dos se rehabilitan. El resto deja el tratamiento por muchos motivos: el factor laboral, inclusive también la abstinencia ya que al estar sin la sustancia, no lo aguantan”.
Factores que influyen
El factor laboral influye para que una persona deje el tratamiento, generalmente son personas adictas con un empleo estable y al internarse corren el peligro de que cuando salgan queden desempleados.
Otro de los factores para que el paciente deje el tratamiento, es la discriminación, ya que la sociedad los señala como drogadictos o alcohólicos. Además está el factor económico para solventar gastos de terapia.
“Desafortunadamente los pacientes no están abiertos a un tratamiento de seis meses, por la cuestión económica y por la discriminación o la cuestión del empleo”.
Dijo que de acuerdo con el Instituto Nacional de Psiquiatría, en su encuesta nacional sobre adicciones 2008, 45.5% de la población queretana consume alcohol.
