La Plaza Fundadores fue rehabilitada y restructurada a finales de los años setenta y principios de los años ochenta. En esta plaza se honra a los personajes que fueron parte de la fundación de la ciudad de Querétaro y está ubicada frente al templo de la Santa Cruz, en el centro de la capital. Ahí fue la batalla del Sangremal que llevó a la fundación de la ciudad.
En ese lugar, el 25 de julio de 1531 se fundó la ciudad de Querétaro y al conmemorarse los 450 años de haberse fundado, el 25 de julio de 1981, se decidió erigir un lugar para los ilustres fundadores de la ciudad, por lo que se colocaron en la plaza las estatuas de: Fernando de Tapia (Conín); Nicolás de San Luis Montañez; Fray Jacobo Daciano y Juan Sánchez de Alaniz.
La versión mítica de la fundación de la ciudad que se encuentra en el libro Historia y monumentos del estado de Querétaro, dice así “Se cuenta que en el cerro del Sangremal caciques otomíes cristianizados y jefes chichimecas acordaron representar una batalla, los pocos españoles que había estarían sólo como espectadores. Se convino combatir sin armas, sólo con puños y pies en un momento dado los ánimos se caldearon y la batalla se fue tornando cada vez más feroz. Entonces sucedió el prodigio: el cielo se obscureció, apareció la cruz y el Apóstol Santiago. Ante el portento, los combatientes cesaron el combate y se rindieron ante la evidencia del nuevo dios. En el cerro del Sangremal, sitio del prodigio, se inició el culto a una Cruz de piedra, pretendidamente réplica de la aparecida durante la batalla. Esta reliquia fue celosamente resguardada por los franciscanos”.
La historiadora Oliva Solís explicó: “A los que vemos ahí son tanto a los frailes franciscanos como a los que se supone son los indígenas que participan en la fundación de la ciudad, a las estatuas que nosotros vemos ahí son estos personajes vinculados con la historia mítica de la fundación de Querétaro, esta el fondo la iglesia de la Santa Cruz con lo que representa la cruz, la batalla del Sangremal y luego quien hace la traza de la ciudad, que también es parte de esta construcción”.
Explicó que esta plaza fue parte de un proyecto de mejoramiento urbano, ya que originalmente ese espacio a finales del siglo XIX era el mercadito La Cruz. Se tomó la decisión de dignificar todo este espacio de la ciudad.