En una íntima charla con EL UNIVERSAL Querétaro, Marcos Aguilar Vega, presidente municipal de Querétaro, devela cuáles son los principales rasgos de su carácter, lo que más detesta en las personas, confiesa lo más arriesgado que ha hecho en la vida, conversa de sus héroes, tanto de la ficción como de la vida real y, entre otros numerosos tópicos, comparte cuál es su ideal de felicidad.

¿El primer rasgo de tu carácter?

—Soy muy pasional y temperamental. Me parece que son dos rasgos muy distintivos de mi carácter, de mi manera de ser, de mi manera de comportarte, de conducirme. Siempre ha sido así.

¿Qué aprecias en un ser humano?

—La inteligencia, sin duda alguna.

¿Qué es lo más arriesgado que has hecho en la vida?

—Nadar con tiburones. Ya tiene tiempo, ya tiene unos años, tengo 44, debió de haber sido hace 7 años, y fue una experiencia muy interesante.

¿Qué esperas de tus amigos?

—Lealtad.

¿Tú principal defecto?

—¡Tengo muchos! Dios Santo, estas son las entrevistas más complicadas, las que tienen que ver conmigo mismo. Mmm, un defecto… puede ser que sea egoísta, en algunos aspectos, en mis sentimientos. Que siempre cuide mucho estar bien yo y, posiblemente, descuide a los demás de la atención y el cariño que deben de recibir.

¿Cuáles son tus hobbies?

—Me gusta mucho montar a caballo, andar en motocicleta, en cuatrimoto y en los razor, que son los carritos que sirven para las montañas. También me gusta nadar, correr y andar en bicicleta. En general, me gustan mucho los deportes extremos. La adrenalina es algo que me gusta mucho sentir.

¿Cuál es tu ideal de la felicidad?

—Creo que se traduce a que la gente cercana a mí esté bien y que quienes estén rodeándome, mi familia, mis amigos, mis amigas, estén pasando por buenos momentos. Eso es lo que más felicidad me da, y en lo personal, alcanzar mis logros personales.

¿Si no fueras presidente municipal, a qué te dedicarías?

—Sin duda alguna, a la academia. Tuve la oportunidad de dar clases en la universidad por 11 años, a nivel licenciatura y siete años a nivel de maestría y ese es un pendiente que tengo para cuando concluya mis actividades en la actividad pública. Quiero ir por mi doctorado y después dedicarme a realizar investigación, en materia naturalmente de gobierno, administración pública, mercadotecnia y política. Me gustaría mucho tener la oportunidad de estudiar en Estados Unidos, en España, en Argentina, en Alemania.

Si no vivieras en México, ¿en qué país o ciudazte gustaría vivir?

—Me gustaría vivir en Madrid. Si no fuera así, en Amsterdam, en Budapest, en Medellín, Colombia, o en Cuba, ya tengo el color ¡ya puedo vivir allá!

De algunos lugares que has visitado, ¿cuál es tu favorito?

—El país que más me ha gustado es Dinamarca, y me encantaría conocer Australia; es un sueño que tengo. Me gustaría, por supuesto conocer más a profundidad Francia, me gusta mucho Paris, pero me encantaría conocerlo con mayor profundidad, pues es un país y una ciudad que tiene cosas extraordinarias y su gente tiene talento.

¿Tienes algún color que te guste?

—Me fascina el azul marino desde muy niño. Es un color poderoso y dominante. Se impone siempre, y suma.

¿Cuál es tu animal favorito?

—El perro, sin duda alguna, porque es un animal leal al ser humano, que siempre va a mostrar su fidelidad, que no la encuentras en todos los que están alrededor de ti. Es un ser que siempre va a estar acompañándote, respaldándote, buscar estar bien contigo. Pero el águila es el animal que más me gusta, por su poder, por su capacidad para cazar, por su imagen, por su estructura, y es interesante, pero es un animal solitario que tiene una gran capacidad para salir adelante.

¿Cuál es tu canción favorita?

—Tengo dos, la de “México Lindo y Querido” y la de “El Jinete”. Ésta es una canción muy triste, pero desde que era muy niño es una canción con la cual sentí muy identificado en su contenido. Me parece que tiene un mensaje muy fuerte sobre la capacidad que tiene un ser humano para enfrentar adversidades.

¿Cuál es la película que más te ha inspirado?

—Morgan Freeman con la película Mandela; esa película y la de Gandhi me cautivaron, me han marcado. A ambos personajes los sigo en su comportamiento, en su manera de conducirse y su forma de hacer política a nivel mundial.

¿Tienes algún autor, filósofo o pensador que tenga una frase que te inspire?

—Tengo muchos pensadores, sobre todo actores en política que me gustan; de carácter internacional, Ghandi y Mandela, y a nivel de nuestra República uno que me gusta mucho es Benito Juárez. Soy juarista desde niño, por herencia maternal y por pensamiento en lo individual. Aunque muchos piensan que puede ser contrario a mi partido político, nada tiene que ver, pertenecen a momentos distintos de la historia. A esos tres los pondría como referentes.

¿Cuál es tu libro favorito?

—Cien años de soledad, de Gabriel García Márquez.

¿Tienes algún héroe de ficción?

—Batman es un héroe anónimo. Aunque sea una cuestión ficticia, en la sociedad hay muchos héroes anónimos que no se conocen, no se observan, pero que existen.

¿Tienes alguna posesión que desde chico has deseado?

—Sí, mi caballo. Ese fue un sueño desde pequeño. En una familia muy cercana a la mía, uno de los hijos tenía un caballo, y ese era uno de mis sueños más importantes que quería alcanzar en la vida. La verdad es que nunca pensé que pudiera querer tanto a un animal, después de mi perro Jachi, a Mister, mi caballo, es el animal que más quiero.

¿Quién es el héroe de la vida real del alcalde?

—Mi padre, sin duda. Él dedicó su vida a trabajar por la educación y formación de sus hijos. Fue un hombre extraordinario que me dio muchas enseñanzas, a pesar de su poca formación académica, pues sólo pudo estudiar hasta quinto de primaria.

¿Cuál ha sido tu mayor desgracia?

—Precisamente la pérdida de mi padre. Como manejó 21 años un taxi enfermó de insuficiencia renal crónica. No teníamos dinero para cambiarle sus riñones, y pues falleció como fallecen muchas personas, a causa de no tener Seguro Social, o las prestaciones que se requieren para un servicio de ese tipo.

¿Cuál es tu ideal del amor?

—Estar alrededor de la lealtad y de la fidelidad, que tengas la capacidad de comprometerte con alguien y que ese alguien te respete siempre.

¿Qué es lo que más detestas en una persona?

—La deslealtad. No la tolero, la desapruebo absolutamente y cuando eso me sucede me alejo inmediatamente de la persona.

¿Tienes algún hábito ajeno que no toleres en las personas?

—La indisciplina, me gusta mucho la disciplina, el orden.

¿Cómo te gustaría morir?

—Dormido… soñando. Ojalá que Dios me conceda esa oportunidad.

¿Tienes algún nombre que te guste?

— El de mi hija Mayte, es un nombre vasco que significa amada, y el nombre de mi hija es una representación muy sólida de la unión que se reflejó en algo muy importante que es mi esposa. Mayte tiene las iniciales de mi esposa y las mias: mi esposa se llama Tere, es Marcos y Tere, esa es la unión.

¿Cuál de los dones de la naturaleza desearías poseer?

—Fíjate que es interesante. Ayer escuché que seis de cada 10 niños cuando les hacen esta pregunta, contestan ‘volar’ y me llamó la atención, yo en realidad no creo que volar, probablemente lo que me encantaría es poder hacer como los peces, poder nadar bajo el aguar sin tener que respirar.

¿Tienes alguna colección?

—Sí, tengo varias colecciones, pero hay alguna en particular que me gusta que es de la película, El Padrino, y también tengo la colección de muñecos de la película Cara Cortada con Al Pacino. Soy férreo admirador de ese actor.

¿Tienes algún juego de mesa de estrategia que te guste?

—El único juego que me gusta jugar de mesa es el dominó y tiene que ver con una capacidad para conocer de qué manera se pueden comportar tus adversarios en la estrategia de los número, la capacidad que puede tener una persona de pensar rápidamente y tomar una decisión sobre cuál es el siguiente movimiento.

Si pudieras comer una sola comida en tu vida ¿Qué sería?

—¡Pulpo al mojo de ajo!, me fascina, en cualquier lugar donde se prepare pulpo al mojo de ajo, y en segundo lugar… ¡el mole de olla!. Son los dos platillos que más me gustan.

¿Si estuvieras en un programa de protección de testigos cuál sería tu alias?

—El Padrino (risas).

¿Cuál es la cosa más bonita que alguien ha hecho por ti?

—Naturalmente darme a mi hija, mi esposa.

¿Si pudieras viajar en el pasado a donde irías?

—Iría a Egipto, y haría un recorrido por el río Nilo, Abu Simbel, el Valle de los Reyes y la pirámide de Giza.

¿Cuáles son las personas que más te han influido?

—Mi padre y mi madre, nadie más que ellos, han tenido la capacidad para direccionar quién soy, espero conducirme, como ellos deseaban que me condujera.

¿Tienes algún lema?

—A paso firme, pero sin pausas.

¿Cuál ha sido tu motivación para llegar a donde has llegado?

—Mi padre, aunque tuvo pocas oportunidades, me demostró sin palabras que uno debía tener sueños y debía de luchar para alcanzarlos, sin importar la cuna de donde provenías, es lo que digo todos los días, en mis discursos, y yo puse cuatro sueños en mi vida, que están muy dirigidos a lo que yo hago que es la política: el primero es diputado local; el segundo, diputado federal; el tercero, presidente municipal, y el cuarto, me lo reservo. Pero eso ya existe y voy a trabajar por alcanzarlo.

En términos personales, surgió una nueva motivación que es mi hija. Quiero ser un buen padre y contribuir en su educación, y poder entregar una mujer que le sirva a este país en buenos términos.

¿Cómo te proyectas en un futuro?

—Me gustaría mucho continuar en la política, y regresar a un cargo legislativo federal, ese sería un objetivo en primera instancia, que yo pondría sobre mi mente y todos los días trabajo para poder construir ese objetivo.

¿Unas palabras para los que quieran cumplir sus objetivos?

— Hay una encuesta que recientemente publicaron, donde a cada 10 adultos que les preguntaban si estaban haciendo lo que querían en su vida, lo que plantearon para su futuro, ocho decían que no, y esto se traduce en frustración. Yo te diría que lo más importante es que los seres humanos tengan la capacidad para concentrarse en alcanzar un sueño, cualquiera que sea.

¿Cuál es la diferencia entre querer hacer y hacer?

—La determinación, allí está todo, la persistencia, la perseverancia. Estoy convencido que allí muchos se quedan, primero porque no tienen un sueño, meta u objetivo; segundo, porque cuando lo tienen no tienen las agallas, el valor o el coraje para alcanzarlo, y ahí hay dos grandes diferencias, entre sentarte a ver como triunfa alguien más o levantarte a intentar tu sueño para ser quien triunfe y poderle platicar a los demás el significado que representan hacer lo que tu querías hacer y lograrlo, y pues hoy lo estoy viviendo.

Cuando digo que soy hijo de un taxista y una maestra de primaria pública, la gente guarda silencio y te observa de manera distinta, y lo que les estoy diciendo es que esa es una historia real que no forma parte de un discurso político; hoy soy presidente municipal y soñé con serlo hace 21 años, y hoy que estoy aquí sentado, lo que puedo decirles a todos es que esa primera parte del sueño ya se consumó, que era llegar, participar en la gran transformación de Querétaro y la estoy viviendo todos los días, aunque esto implique retos muy importantes en todos los momentos que vives aquí.

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