En las comunidades La Laja y La Tortuga, municipio de Tequisquiapan, se conformaron 19 círculos de lectura, integrados en su totalidad por 300 niños y jóvenes.
De acuerdo con la “Encuesta Nacional de Hábitos, Prácticas y Consumo Culturales” realizada por Conaculta en 2010, sólo uno de cada tres queretanos lee al menos un libro completo al año, siendo la novela el género que más se adquiere, seguido de libros de historia y de superación personal.
Además, uno de cada dos queretanos nunca ha visitado una biblioteca y dos de cada tres jamás han acudido a una librería.
“La información resulta alarmante cuando se sabe que 95% de los hogares tienen al menos un aparato de televisión y 88% de la población acostumbra utilizar este medio, en el que según expertos, los niños mexicanos invierten 2 mil horas al año en contraposición a las 800 horas que le dedican a la escuela, al tiempo que quedan expuestos a 57 escenas de violencia por hora de programación televisiva infantil”, destacó la senadora Marcela Torres Peimbert.
Por ello, en Querétaro se implementaron los círculos de lectura como un esfuerzo por acercar a niños, jóvenes y adultos a las letras.
Torres Peimbert subrayó la necesidad de fortalecer las actividades culturales, ya que la adquisición de libros infantiles o de política por ejemplo, ocupan los lugares 15 y 16 del consumo entre la población de la entidad.
“Una lectura más sencilla como podría ser el periódico, se realiza máximo dos veces a la semana por un 64% de la población en la entidad”, aseguró.
Destacó que el mexicano lee en promedio 2.8 libros al año incluyendo los libros de texto gratuito: “razón por la cual hay que incrementar tanto el promedio de libros leídos como el número de lectores. En la medida en que obtengamos más y mayores resultados en el ámbito cultural tendremos un mejor desarrollo como sociedad” expresó Torres Peimbert.