Las denuncias que se presentan por acoso sexual que viven las mujeres en las calles es una forma de visibilizar la violencia de género y frenar esta tipo de situaciones, advirtieron las activistas Gisela Sánchez Díaz, integrante del Frente Queretano contra la Discriminación y por el Estado Laico, así como Alejandra Martínez, miembro de la agrupación Aquesex.
Lo anterior, posterior a que una joven grabara a un hombre que le dio una nalgada en el puente peatonal de 5 de febrero a la altura de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ). Al respecto, las activistas, en entrevista por separado, advirtieron la necesidad de denunciar la violencia verbal y física que afecta a las mujeres del estado de forma cotidiana.
La representante del grupo Aquesex consideró que la denuncia es un medio para visibilizar la violencia, pues dijo que el acoso callejero ha sido normalizado por la sociedad y ha permitido acrecentar las situaciones de violencia hacia las mujeres.
“Las mujeres estamos acostumbradas a este tipo de circunstancias y el asunto es cómo dejamos de acostumbrarnos a ello, cómo podemos denunciar por lo que nos implica a nosotras, no andar libremente por la calle (…) Es importante que visibilicemos, si bien, algunas no querrán llegar a la denuncia penal ante la Fiscalía. Me parece que hay muchas otras alternativas, la denuncia pública, la denuncia en redes sociales. No hay que quedarnos calladas y como la chica de 5 de febrero, mejor tomar una foto, un video y visibilizarlo”, señaló.
Necesaria legislación desde el Congreso. Por su parte, Sánchez Díaz, integrante del Frente Queretano contra la Discriminación y por el Estado Laico, consideró que es importante que se legisle el acoso callejero, pues a raíz de las modificaciones en el marco jurídico, es posible generar una pauta para un cambio cultural y dejar de lado la cultura del acoso en la sociedad. Lo anterior, ante la iniciativa impulsada por el Partido Revolucionario Democrático (PRD) que busca tipificar el acoso sexual callejero y que hasta el momento no ha sido aprobada por la Comisión de Administración y Procuración de Justicia de la 58 Legislatura estatal.
“Estoy de acuerdo con que se hagan estas denuncias, que son acosos y a veces francas violaciones (…) Es verdad que a veces no porque haya una ley ya se cumpla al pie de la letra, pero que haya una ley es una pauta cultural (…) lo mínimo, que podrían hacer los diputados es justamente aprobar leyes que mejoren la convivencia y la calidad de vida de los ciudadanos”, señaló.
En este sentido, Martínez consideró que la Legislatura se debe involucrar para frenar la violencia hacia las mujeres, pues acusó al Congreso local de no estar interesado en temas relacionados con la procuración de los derechos humanos. Señaló que no trabajar en este tipo de propuestas, invisibiliza el acoso y refleja el nivel de “machismo” por parte de los legisladores.
“Yo no creo que todo tuviese que pasar por la Legislatura, por la ley (…) pero en este tema ha sido necesario que justo la legislatura se involucre, que justo pueda marcar una pauta respecto a la desnormalizaciòn de ciertas conductas que son reprobables (…) Justo tiene que haber sensibilidad, pero vuelvo a lo mismo, si no tienes una ley que penalice, sigue siendo como un tema escondido”, sostuvo la integrante de la agrupación Aquesex.