En un sondeo realizado por EL UNIVERSAL Querétaro a taxistas de la capital, éstos coincidieron en que la colonia Menchaca III, ubicada al norte de la ciudad, es la más insegura de la zona conurbada.
Por ello, los trabajadores del transporte público han decidido tomar sus propias medidas de seguridad como no transitar por este lugar para abordar o cargar pasaje o traer un tubo de metal o un palo debajo de su asiento para defenderse en caso de requerirlo, manifestaron los taxistas.
Redentor Torres Martínez, taxista desde hace ocho años en la capital queretana, aseguró que la colonia más insegura de la zona metropolitana es Menchaca III, seguida de la localidad Bolaños, en la cual la intranquilidad ha aumentado en los últimos años.
“Yo creo que esto se debe al crecimiento que ha tenido la ciudad y, en especial, con la llegada de personas de otras entidades. Yo por ejemplo desde las ocho de la noche ya no voy para nada para esa parte, no vaya a ser y me quieran asaltar”, dijo.
Asimismo, Redentor Torres lamentó que hace seis meses en esta parte de la ciudad uno de sus compañeros taxistas fue asesinado por poner resistencia a un asalto en esta colonia.
Por su parte, Guadalupe Sánchez Hernández, taxista desde hace 25 años, se quejó de que las autoridades municipales y estatales han hecho caso omiso de las denuncias de los vecinos, por lo que él ha tomado la decisión de cargar consigo un tubo de metal para defensa personal.
“A mí ya me asaltaron, me quitaron mi celular y solo 300 pesos, por 300 pesos me golpearon en todas partes. Yo llame a la policía y nunca llegaron, los que llegaron fueron mis otros compañeros a auxiliarme”, explicó Sánchez Hernández.
Asimismo, reconoció que existen casos en los que taxistas se dedican a asaltar no solo al pasaje, sino a transeúntes. No obstante, recalcó que no por personas que se dedican a cometer ilícitos todos los trabajadores del volante deben ser responsables.
“No es justo que nos tachen de delincuentes, es cierto que hay personas que asaltan, a ellos que los metan a la cárcel, pero se han dado casos que a nosotros nos piden mordidas (elementos policiacos) para trabajar y que no acusen de asaltantes”, denunció Guadalupe Sánchez.
Para finalizar, los entrevistados explicaron que la falta de participación de las autoridades de seguridad en Querétaro, los ha obligado a tomar la decisión de acudir a cualquier llamado de algún compañero en caso de que requiera ayuda porque es víctima de algún asalto.