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Ante el fenómeno mundial del cambio climático, los productores del campo se han visto en la necesidad de modificar su tradición de cultivo. En el caso de Querétaro, la cebada ha tenido un incremento en la producción y se posiciona como el principal producto de temporal.
Durante el ciclo otoño-invierno 2012, se sembró una superficie de 6 mil hectáreas, de las cuales 3 mil son de cebada, confirmó el secretario de Desarrollo Agropecuario, Manuel Valdés Rodríguez.
Las condiciones actuales de la tierra son propicias para este producto, explicó, lo que implica una alternativa segura para los productores, ya que la siembra es por contrato, es decir, la venta de la cosecha es seguro.
La cebada es un cereal de los conocidos como cereal de invierno, se cosecha en primavera (mayo o junio) y generalmente su distribución es similar a la del trigo.
Ejemplificó el caso de Sinaloa que en 2011 se replicó en una crisis en la producción del maíz. Este fenómeno explica cómo han ido evolucionando los cultivos tradicionales.
“En México y en otras regiones, no era situación común o previsible que hubiera heladas en Sinaloa, llevamos dos años en los que las hay. Esto quiere decir que los productores ya no sembrarán maíz”, declaró Manuel Valdés Rodríguez.
La cebada se ha constituido como el principal cultivo en el ciclo otoño-invierno, el principal en primavera-verano es el maíz.
Actualmente mil 500 productores se dedican a esta actividad, tienen asegurada la venta, ya que estas hectáreas equivalen a 37 mil 110 toneladas, con ingresos totales de 141 millones 703 mil pesos.
Por cada hectárea sembrada de cebada se obtienen 5.71 toneladas del producto, que se cuenta como uno de los más altos a nivel nacional.
Pedro Escobedo y San Juan del Río son los principales productores, y básicamente es cosecha comprada por compañías cerveceras.
