Debido al clima de inseguridad que se padece en otros estados de México, alrededor de 100 abogados llegaron a Querétaro en los últimos meses, para vivir y ejercer su profesión, estimó Calixto de Jesús Santiago, presidente del Colegio de Abogados Litigantes del Estado de Querétaro.
Durante todo el 2013 y el primer trimestre del 2014, los legistas vinieron de Tamaulipas, Nuevo León y Michoacán, enumeró de Jesús Santiago, quien además consideró que algunos abogados provienen del Estado de México y del Distrito Federal.
La mayoría de los abogados que han encontrado refugio en Querétaro, estimó el litigante, han trabajado por honorarios en sus estados de origen.
Por dicha razón, el cobro de “cuotas” para poder litigar que realizan algunos grupos criminales es la razón principal por la cual, durante los últimos 15 meses, se ha presentado este éxodo.
Los municipios en los que se han establecido estos nuevos queretanos, reconoció, se ubican tanto en la zona serrana, como en la zona del semi desierto, además de los municipios de San Juan del Río y la propia capital del estado.
“Ellos llegan en realidad huyendo por la inseguridad que se vive en otras ciudades. Encuentran por un lado una paz y un clima de tranquilidad invaluable, además de una gran oportunidad de negocios. No podemos decir que se concentran en una sola zona, más bien acuden y se instalan, prácticamente en todos los municipios, peros destaca la zona serrana, el semi desierto, San Juan del Río y desde luego la capital”, detalló.
De cualquier manera, desde el punto de vista del Colegio de Abogados Litigantes, técnica y metodológicamente, los abogados forjados en instituciones educativas locales están mejor capacitados y adecuados a la realidad jurídica de Querétaro y de otros estados.
No obstante, de Jesús, reconoció que algunos procedimientos que realizan abogados queretanos en otras ciudades del país se han visto entorpecidos durante los últimos meses, debido al clima de inseguridad que priva en dichos lugares. “Prácticamente los abogados nos comentan que no pueden trabajar después de las 5, 6 de la tarde. Aquellos compañeros que se ven en la necesidad de acudir a centros penitenciaros para visitar a sus clientes no lo pueden hacer si antes no se paga una cuota. Estas situaciones son muy complejas en realidad”, agregó finalmente el abogado.