La Fundación Haití Tûmû informó que es necesario que en el estado se conforme un centro de atención especializado en pacientes terminales, en donde se les ayude a morir de manera digna y en familia. Este centro será construido por dicha organización para 2016.
De acuerdo con Efraín Servín, director ejecutivo de esa fundación, ésta nació hace un año con el objetivo de dar atención integral a los enfermos terminales y a sus familias, con terapias sicológicas, tanatología, y cuidado paliativo para acompañarlos en sus últimos procesos de vida.
“La fundación tiene un año trabajando; estamos en hospitales brindando estos servicios de manera gratuita para que las personas cuenten con este apoyo en caso de no tener los recursos para el proceso de algún familiar en proceso terminal”, comentó.
Detalló que son cerca de mil personas a las que han atendido, principalmente del IMSS y el ISSSTE, lugares en donde, explicó, se ha detectado la necesidad de que los pacientes en esta etapa cuenten con una vida digna en sus últimos días.
Adriana de León, fundadora y presidenta de la fundación, dijo que en el Seguro Social son más de mil 200 enfermos terminales; en el ISSSTE, 72 y en el Hospital General más de 2 mil.
“A partir de esta necesidad es que surge la idea de poner un centro especializado en el manejo del enfermo terminal, no se trabaja sólo en hospitales, también en casas. La idea es salir cuando ya estemos preparados, enseñar a las familias que el enfermo debiera de morir en casa”, aseguró.
Explicó que la mayoría de las familias que cuentan con enfermos terminales temen llevarlos a casa, cuando en los hospitales lo único que hacen es tener conectado al paciente, además de que mueren sin acompañamiento de sus familiares.
“En muchas ocasiones queremos mantener a nuestro familiar conectado, pese a que sabemos que se está muriendo, y mantenerlo ahí lo más que se pueda; puede sufrir una muerte crónico-degenerativa y puede ser más de un año en una fase muy difícil, aunque nosotros dentro de la fundación lo consideramos dentro de los últimos seis meses de vida y los más conveniente es que sea en casa”.
En este sentido, señaló que en el caso del Hospital del Niño y la Mujer, se reporta la muerte de entre cuatro y seis infantes por diferentes enfermedades pese a que reciben un excelente servicio médico, pero no permiten a los padres estar con ellos al momento de la muerte.
“Lo único que ven es la cara de un desconocido y no van a morir en los brazos de sus padres, eso es lo que queremos hacer en este centro, estamos apenas en las negociaciones para el terreno y esperamos que antes de que termine el próximo año podamos poner la primera piedra, es una inversión muy fuerte, de más de 50 millones de pesos”, comentó.