Ya fueron instalados al interior del penal varonil de San José El Alto, equipos inhibidores de señal de celular con lo que los reos no podrán realizar llamadas por equipos no registrados o ingresados de contrabando, confirmó el subsecretario de gobierno Alfonso Jiménez Campos.
Con una inversión total de 9 millones de pesos los equipos para terminar con las señales de los teléfonos celulares, ya se encuentran operando al interior del penal varonil por ser el de mayor población con más de 400 internos.
La instalación de estos equipos cumple con las normas establecidas por el Sistema Nacional de Seguridad para garantizar que la única comunicación de los reos con el exterior, se haga a través de los teléfonos públicos ubicados al interior del Penal y con esto también, evitar que se generen llamadas de extorsión desde este centro de reclusión.
Los 9 millones de pesos son prevenientes de recursos federales del Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública, mismos que se manejaron para aumentar la seguridad al interior de este centro penitenciario. EL Subsecretario de gobierno Alfonso Jiménez Campos confirmó que los equipos se encuentran trabajando y no ha habido fugas de señales celulares al interior de este centro.
“La contratación la hizo la oficialía mayor y ya se encuentran operando estos equipos. En la última revisión que se realizó al interior del penal varonil de San José el Alto se encontraron dos equipos celulares de contrabando, pero no se pueden realizar llamadas desde el interior del penal, se decidió que fuera el varonil por ser el de mayor población”.
Con mil 451 internos la población del centro de readaptación social de San José el Alto se encuentra en condiciones óptimas para operar, la única forma que tienen los reclusos para poder establecer comunicación con el exterior son los teléfonos públicos que se localizan en el interior de este penal. La familia de los internos les entregan cada semana una tarjeta de 30 pesos que es lo permitido para poder hacer llamadas.
De acuerdo a las normas internas del centro de readaptación social, los reclusos tienen derecho a una llamada telefónica por semana, en donde una grabación es la que inicia y solicita la autorización para continuar la llamada, por lo mismo las normas de operar de este sistema sí se encuentran bajo regla.
A decir del mismo subsecretario de gobierno, no se ha detectado que de este penal se hayan realizado llamadas de extorsión, pero los elementos de la Dirección de Investigación del Delito (DID) se encuentran investigando las más de 600 denuncias que se han recibido a la procuraduría General de justicia del estado por este tipo de llamadas.