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En lo que va de este año el cuerpo de Bomberos de Querétaro ha atendido mil 360 incidentes, en los cuales no se ha reportado bajas o lesiones entre los 168 elementos que conforman el grupo de respuesta, informó el comandante del Cuerpo de Bomberos del estado, Juan Carlos Hernández Reyes.
Los servicios que se han prestado corresponden a 273 fugas de gas, 790 incendios en terrenos baldíos, 274 incendios en vehículos, 73 en casas habitación.
Del total de los elementos que operan en el cuerpo, 60 personas perciben un sueldo, mientras que 108 son los voluntarios que operan sólo en su tiempo libre. Asimismo Hernández Reyes explicó que la agrupación cuenta con 36 bomberos paramédicos, de los cuales ocho son mujeres.
“El papel de los paramédicos es asistir a las personas que se vieron afectadas en el percance, quienes pueden ser atendidas en el lugar del incendio o fuga de gas, para posteriormente ser puestas a disposición de los paramédicos que cuentan con una ambulancia, ya al exterior del lugar del siniestro o fuga de gas”, explicó el bombero.
De igual manera, Hernández Reyes dijo que los bomberos de Querétaro se encuentran activos las 24 horas para en caso de una emergencia puedan actuar con rapidez. Los bomberos de Querétaro se encuentran distribuidos en cuatro estaciones, las cuales se encuentran ubicadas en Pie de la Cuesta, Jurica, Vista Alegre y Zaragoza.
El comandante detalló que para que una persona esté capacitada para atender un incendio, debe contar con año de adiestramiento, para posteriormente presentar un examen en el que demuestren que son capaces para seguir el protocolo al pie de la letra y responder efectivamente ante una situación de estrés como las que indican incendio.
El entrenamiento de un elemento del cuerpo de bomberos consiste —principalmente— en el acondicionamiento físico y la utilización adecuada del equipo que les será entregado para atender la emergencia —el casco, la monja, el chaquetón, pantalón, guantes, botas, el tanque de aire comprimido, las mangueras, así como el camión de bomberos.
“Es de suma importancia que nuestros bomberos sigan estrictamente el protocolo, ya que de ello depende no sólo su vida o la de la población en general; además deben de estar capacitados para controlar el miedo que en ocasiones puede provocar el enfrentarse a accidentes considerables”, apuntó el comandante.
Para finalizar, celebró que el tiempo en que el equipo de rescate llega al lugar para atender el percance es de tres a cinco minutos, sin embargo, lamentó que en ocasiones este periodo aumenta debido a la falta de cultura de los automovilistas, quienes obstruyen el paso a la unidad.
“El tiempo de respuesta del cuerpo de bomberos depende de la hora y del lugar en el que nos encontremos nosotros, y donde haya sucedido el accidente, por ejemplo, si el percance sucede en hora pico, tardamos aproximadamente 15 minutos en llegar al lugar, ya que las personas muchas veces no tienen la cultura de abrirse o hacerse a un lado cuando el camión de bomberos requiere pasar”, concluyó.