Durante la primera semana de clases, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó inspecciones a 136 escuelas particulares y colocó 53 sellos de suspensión por el incumplimiento a las leyes de protección al consumidor.
Así lo informó la delegada de Profeco en Querétaro, Dalia Garrido Rubio, quien recordó que las escuelas particulares también venden un servicio, por lo que existen normas.
“Varía el padrón de escuelas particulares, van llegando nuevas instituciones al estado, pero tenemos un padrón de más de mil escuelas; revisamos 136 de todos los niveles académicos”, explicó Garrido.
El principal aspecto a revisar, de acuerdo con Profeco, es el relacionado con la colegiatura, y enfatizó que las instituciones tienen prohibido aumentar las cuotas a mitad de ciclo escolar. La tarifa debe ser informada, por lo menos, 60 días antes del inicio de un ciclo escolar, previo a la reunión de los consejos escolares respectivos y la aprobación del incremento; de manera que los padres deben conocer las nuevas disposiciones dos meses antes de un nuevo año escolar.
Las escuelas particulares no pueden obligar a comprar útiles o uniformes dentro de la misma institución.
Mientras que los gastos que deriven de alguna celebración social o cívica deben ser voluntarios, además que deben ser dentro del horario de clases del menor.
Los sellos de suspensión, recordó, implican una medida de advertencia, indican que la institución incumple con algún aspecto de la normativa.
En una segunda inspección Profeco verifica que las violaciones se hayan solventado para proceder al levantamiento de sellos y, en caso contrario, se aplican multas que van de los 5 mil hasta los 80 mil pesos.