El municipio de Querétaro busca obtener la donación de un predio del gobierno estatal para poder ampliar las instalaciones del rastro municipal, a fin de colocar el biodigestor que producirá biogas.
De acuerdo con el secretario de Servicios Públicos Municipales de la capital, Gustavo Zepeda Ruiz, el terreno también servirá para colocar otras dos cámaras de refrigeración para incrementar 20% el número de reses, ovinos y cerdos que son sacrificados para consumo humano.
“El biodigestor se va a ubicar en la parte posterior del rastro. El terreno ubicado atrás es del gobierno del estado y estamos gestionando la donación de una hectárea adicional para poder complementar las instalaciones del rastro”, dijo.
En el rastro municipal TIF (Tipo Inspección Federal) se sacrifican en promedio al mes 10 mil porcinos, 3 mil bovinos y mil 500 ovinos. El costo por matanza de cada animal va de 56 hasta 250 pesos, dependiendo del tipo de animal.
Zepeda Ruiz manifestó que si el terreno fuese donado media hectárea serviría para la colocación del biodigestor, mientras que para las dos cámaras se destinarían 600 metros, por lo que el rastro ocuparía en total un predio de 3.4 hectáreas.
El funcionario municipal agregó que se iniciaron las pláticas con el oficial mayor del estado, Julio César Pérez Rangel, para que se logre la donación de dicho predio.
“Son puras pláticas, no hemos hecho una solicitud formal, trabajaremos la solicitud regresando de la semana mayor”, aseguró.
Zepeda Ruiz dijo que actualmente se gestionan 1.2 millones de pesos para efectuar mejoras a este espacio dedicado al sacrificio de animales.
Por su parte, el director del rastro municipal, Francisco Ramírez Velázquez, comentó que actualmente el rastro cuenta con la acreditación TIF 412 por las condiciones de sanidad en las que se encuentra, por lo que es inspeccionado diariamente por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
“Torreón y Chihuahua son los únicos rastros municipales con sello TIF a nivel nacional y en general Senasica tiene 563 registros de rastros y plantas de deshuese, entre otros”, apuntó.
Explicó que hay dos médicos especiales de la Senasica que de manera permanente revisan las instalaciones del rastro, así como los procesos para que se cumpla en todo momento con la normatividad, como aplicar medidas de sanidad, buenas prácticas de manufactura y sacrificio humanitario, entre otras.
Concluyó que el tratamiento de matanza que se tiene en los animales no es cruel, ya que no se les provoca ningún sufrimiento.