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Un rastro clandestino fue clausurado en el municipio de Querétaro, en la calle San Antonio, colonia Lomas de San José, por la Secretaría de Seguridad Pública y la Dirección de Inspección.
Las autoridades acudieron al lugar después de recibir múltiples denuncias ciudadanas, donde reportaban que el lugar operaba en la ilegalidad.
Al hacer las revisiones correspondientes, concluyeron que el sitio no contaba con licencia para venta de cárnicos y que tampoco cumplía con medidas de salubridad ni de sanidad, por lo que procedieron a cerrar el establecimiento para evitar la venta de carne contaminada.
El director de Inspección, Hugo Serrano, señaló que en el lugar sí se encontraron herramientas para la matanza de animales.
“Pedimos que nos mostraran la licencia y no la tenían, entonces de acuerdo con nuestro reglamento actuamos, suspendimos la actividad en el lugar. Vimos que sí había actividad de matanza, encontramos carne, refrigeradores, cuchillos, etc. Detectamos que mataban cerdos”, comentó.
Si el establecimiento quiere reactivar la venta de carne, tendrá que ponerse al corriente con la documentación requerida por el municipio, como el cambio de uso de suelo y la licencia correspondiente.
Este es el tercer rastro clandestino que es clausurado por autoridades municipales. En lo que va de la administración, se procedió con el cierre de uno ubicado en la comunidad de El Nabo, otro en Santa Rosa Jauregui, y el más reciente es el ubicado en la colonia Lomas de San José.
Dependiendo de las condiciones en las que se encuentre el lugar, la multa interpuesta por la Dirección de Inspección varía entre 800 y 16 mil pesos.
Serrano detalló que para volver a operar deberá contar con documentos que avalen el cambio de uso de suelo, cumplir con normas de salubridad, pagar la multa y finalmente tramitar la licencia.
“Para cumplir con nosotros tendrían que tener un dictamen de cambio de uso de suelo, con Protección Civil tendrán que comprobar medidas de seguridad, y también deberán contar con medidas de salubridad y presentarlas a las autoridades correspondientes. Tendrían también que cumplir con el pago de la multa para proceder con el retiro de los sellos”.
“La clausura es el principio de un acto administrativo, este acto termina con la presentación de la licencia correspondiente y en caso de que las autoridades no otorguen la licencia, se firma una carta compromiso donde dicen que no volverán a practicar esta actividad”, comentó Serrano.
Señaló que los rastros antes clausurados en El Nabo y Santa Rosa Jáuregui ya pagaron las multas. Advirtió que los establecimientos se monitorean de manera constante.
