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El presbítero queretano Arturo Méndez Camacho, acusado de abuso en contra de dos menores de edad, tendrá a la par del juicio penal, un juicio canónico, a través del cual la Iglesia determinará si es o no culpable. En caso de resultar responsable se procederá a ejecutarle su retiro sacerdotal, informó el vocero de la Diócesis de Querétaro, Saúl Ragoitia.
Dijo que actualmente el sacerdote lleva su proceso con abogados que le están dando asesoría desde el primer día que se le detuvo, razón por la cual la Iglesia está al pendiente sobre los resultados que arroje el proceso. “Lo que puedo informar es lo que ya todos sabemos, lo que ya se ha dado a conocer, y solamente estamos esperando la información de los abogados”.
Comentó que el sacerdote tiene un permiso para enfrentar el juicio penal ante la justicia. Sin embargo, recordó, éste sigue siendo eclesiástico, únicamente no está ejerciendo su cargo.
Y es que, agregó, la suspensión del cargo como sacerdote es un documento expedido por el obispo, en donde se dictamina que un presbítero debe dejar de ejercer, situación que no se ha generado.
Saúl Ragoitia comentó que el obispo de Querétaro, monseñor Faustino Armendáriz, ha señalado que este padre será sujeto a un juicio canónico eclesial, que implica realizar una investigación, de acuerdo a todo lo que ya se tiene y los elementos que hay, y en donde tendrá que comparecer para poder analizar lo que sucedió y llegar a una sentencia.
En cuanto al llamado que hace la grey católica en el estado hacia los sacerdotes en este tipo de temas, el vocero aseveró que el llamado ha sido continuo y constante, por lo que no se ha dejado de hacer, incluso por parte del Vaticano.
Precisó que desconoce el estatus del caso, y si en sus declaraciones ha dicho que es culpable o inocente; por lo tanto, se deberá esperar a que concluya el proceso y a la información emitida a través de sus abogados.
