Para los alumnos de la segundaria Roberto Ruiz Obregón ya no es novedad que jóvenes ajenos a la escuela, se acerquen a ellos para proponerles que vendan droga.
Es a la hora de salida del turno vespertino cuando estudiantes y padres de familia se han percatado de la presencia de estos narcomenudistas y se les identifica por su corta edad, que están en espera de que salgan los estudiantes. De acuerdo con testimonios algunos alumnos salen y abordan los vehículos de los que, presuntamente venden droga y se retiran con ellos.
“Estos jóvenes llegan a la escuela, se acercan a los estudiantes y tratan de convencerlos para que vendan droga, lo sabemos porque nuestros propios hijos los han visto,” aseguró Mónica, madre de Arturo, que cursa el primer grado de secundaria.
Arturo proviene de la ciudad de México, y a una semana de haber ingresado a la secundaria, reconoce haber recibido la oferta de vender droga a sus compañeros. Su madre lo acompaña todos los días a la escuela, teme que su hijo pueda ser víctima de los narcomenudistas
A Claudia Bautista, madre de una de las estudiantes de primer grado le ha tocado ver a los jóvenes ofreciendo droga a los estudiantes; el más reciente caso lo presenció el viernes pasado, pero los narcomenudistas huyeron del lugar al escuchar las sirenas de las patrullas, que en realidad eran vehículos de bomberos que intervinieron en el incendio en una empresa.
Comentó que hace dos años se llevó a cabo el operativo Mochila y se detectaron a estudiantes que portaban mariguana y un polvo blanco.