De acuerdo con el secretario de Servicios Públicos Municipales de Querétaro, Gerardo Hernández Camacho, debido a la gran demanda de los servicios que se deriva del crecimiento poblacional se analiza la creación de una segunda Unidad de Control Animal, que habría de ubicarse en la zona norte de la ciudad, pues ahí se tiene gran problemática al respecto.
A decir de Hernández Camacho, actualmente en las delegaciones de Santa Rosa Jáuregui, Epigmenio González y otras de aquella zona de la ciudad, son las que presentan más problemática con caninos en situación de calle, por lo que recordó que actualmente cuentan con siete vehículos, cinco de captura y dos que hacen las visitas de supervisión.
“Por supuesto que la necesidad de la ciudadanía ya nos hace pensar en una segunda Unidad de Control, está pensada y proyectada para la zona norte, que es una zona donde es bastante necesitada la unidad; sin embargo, será una cuestión que se tendrá que analizar sobre su creación”, mencionó.
A un costo de un millón de pesos, la remodelación de la Unidad de Control Animal se habría realizado en marzo y devino en una mejora de las instalaciones, sin embargo, se redujo la capacidad de atención en 20%.
Al respecto, Gerardo Hernández puntualizó que podría provocar una sobre población de animales en un tiempo de tres años, debido a la propia demanda de la ciudadanía.
De enero a julio de este año, se han ingresado 3 mil 206 animales a la unidad. El funcionario destacó que todos los reportes son atendidos y que más de mil han sido por maltrato. Hernández Camacho mencionó que en la Unidad de Control Animal se cuenta con cinco médicos, quienes brindan el servicio de esterilización de todos los animales que son puestos en adopción.
El secretario de Servicios Públicos Municipales de Querétaro comentó que el simple hecho de que se encuentre en la calle a un perro o un gato, representa una falta por parte el dueño. Es entonces cuando la criatura es capturada y llevada a la Unidad de Control Animal, donde es retenido hasta que su dueño lo reclama.
Posterior a las festividades decembrinas, el abandono de los animales representa un aumento considerable, aseguró el funcionario, y es que en fiestas como Navidad y Día de Reyes, los padres dan mascotas, y luego de unos meses o incluso semanas, son abandonados, por no poder cuidarlos.