Las personas con discapacidad visual han sido las menos tomadas en cuenta en el tema de la accesibilidad manifestó la directora de la Coordinación de Accesibilidad y Desarrollo para Personas con Discapacidad del municipio de Querétaro, Lídice Rincón Gallardo, quien comentó que a los gobierno les ha faltado sensibilidad para atender a este sector de la población
En las calles de la ciudad de Querétaro hacen falta infraestructura para ser accesible a las personas con discapacidad, entre ellas para los débiles visuales señaló Rincón Gallardo.
Agregó que para hacer una ciudad amigable con las personas con discapacidad se están implementando políticas públicas para ayudar a quienes padecen problemas motrices, visuales, problemas para oír, trastornos mentales o de comunicación.
La coordinadora de accesibilidad explicó que se está planeando construir rampas, por ejemplo: en las escuelas o bien la colocación de señalética que indique a las personas ciegas o débiles visuales que han llegado al final de las banquetas.
“Hay rampas, las que están bien hechas no se sienten, no se deben sentir, éstas van a tener unos bordos que indican que ya terminaron”, señaló Rincón Gallardo.
Destacó que parte de estas acciones se comienzan a ver en la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), donde habrá adaptaciones en las 13 facultades y en la Preparatoria Norte, con el objetivo de que los estudiantes puedan acceder a las aulas sin ninguna dificultad,
Dijo que ha faltado una coordinación adecuada entre las autoridades y la sociedad civil, ya que no importa que se tenga al mejor especialista que conozca a fondo el tema; sino lo importante es escuchar a aquellas personas que viven a diario las dificultades de tener una discapacidad en una ciudad que no es accesible.
“Los que viven esta problemática en el día a día, son las personas que tienen alguna discapacidad, son las madres que se les dificulta llevar a sus hijos a la escuela porque su trabajo, o son los padres que lo pierden por alguna discapacidad, porque las empresas no tiene accesibilidad” dijo.
Rincón Gallardo resaltó que además de la coordinación que se debe dar entre el gobierno y la sociedad civil, hacen falta recursos económicos para poder hacer una ciudad accesible y amigable.
“No sabría decir a ciencia cierta la cantidad, pero si estamos tomando en cuenta que una rampa te puede salir en 20 mil pesos aproximadamente y que está ya incluya los bordos para ciegos, más o menos échale un cálculo y nos hacen falta también los semáforos auditivos”, detalló.
Apuntó que están buscando que el municipio sea modelo en la inclusión de las personas con discapacidad en las actividades diarias, ya que de acuerdo con el Censo de Población y Vivienda 2010, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en la entidad hay un total de 84 mil 250 personas con discapacidad, de los cuales 51.7% son mujeres y 48.3% son hombres.
De ellos 25.6% tienen dificultades para ver, entre ellos se ubica a quienes utilizan anteojos, es decir 21 mil 568 ciudadanos.