A las 10:40 de la noche del pasado jueves, la Unidad Municipal de Protección Civil recibió un llamado de emergencia por dos personas que caminaban sobre la estructura de Los Arcos de Querétaro.

El coordinador de esta dependencia, Fernando Martínez Garza, dio cuenta que los jóvenes Ricardo y Felipe, de entre 25 y 30 años de edad, fueron remitidos por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal al Juzgado Cívico.

“Recibimos una alerta de que había dos personas en la parte superior de Los Arcos, acudimos al lugar, solicitamos el apoyo de Bomberos, de Guardia Municipal y de los cuerpos de emergencia, que en este caso fue Cruz Roja, y efectivamente encontramos que había dos jóvenes de entre 25 y 30 años de edad a la altura de Circunvalación”, señaló.

Explicó que ambos subieron a la estructura por el primer arco que se ubica en la zona de Milenio III, al llegar los cuerpos de emergencia siguieron a los jóvenes hasta que llegaron al último arco, en la zona de uno de los Centros de Atención y Desarrollo Integral (CADI) del DIF estatal, cerca de la calle Ejército Republicano.

“Ya habían recorrido buena parte de Los Arcos, llegaron al otro lado, es decir a donde está el CADI del DIF; dijeron llamarse Felipe y el otro Ricardo, fueron puestos a disposición de la Guardia Municipal, quienes lo llegaron a los Juzgados Cívicos”, dijo.

De acuerdo con la versión de los elementos que los resguardaron, los jóvenes mencionaron que se subieron al monumento histórico por una apuesta; además, y sin que conste en una prueba de alcoholemia, presentaban aliento alcohólico y gritaban consignas de Gallos Blancos.

El funcionario indicó que este tipo de prácticas son un tema de cultura, por lo que a las autoridades sólo les queda estar atentos a que un hecho de este tipo no se vuelva a repetir, haciendo el llamado para que las personas valoren su integridad.

“Lo que sí estaremos en coordinación con la Guardia Municipal, como siempre estamos procurando que este tipo de actividades no se den”, mencionó Fernando Martínez.

Finalizó que se necesita una cultura de la prevención, más allá de “bardear o proteger la estructura” para que nadie la toque: “no se trata de poner bardas en todos los lugares en donde pudiera haber un riesgo, no se trata de eso; al final del día Los Arcos es algo que distingue a Querétaro, no lo podríamos enrejar”.

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