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Con la separación de residuos sólidos urbanos en el ayuntamiento de El Marqués, autoridades municipales buscan reducir los costos de confinamiento de sus desechos en el relleno sanitario La Esperanza, en Colón.
El secretario de administración de El Marqués, Noé Miguel Noriega Paredes, informó que en un mes se pondrá en marcha un proyecto piloto de separación de residuos sólidos que, de funcionar, podrá reducir la confinación de 90 a 55 toneladas que actualmente se depositan en Colón.
Con el programa se busca que 35 toneladas no sean depositadas en algún relleno sanitario, sino que sean vendidas o reutilizadas, con el objetivo de abaratar los costos producidos actualmente por el confinamiento de los residuos marquesinos.
“El confinar los residuos sólidos urbanos nos cuesta 130 pesos la tonelada, en un día recolectamos un promedio de 90 toneladas las cuales nos cuestan 300 mil pesos mensuales —el confinamiento nada más— al mes recolectamos cerca de mil 900 toneladas”, expuso el funcionario.
De ser funcional el plan piloto el ayuntamiento del Marqués ahorraría 4 mil 550 pesos diariamente, es decir 136 mil 500 pesos al mes; el programa piloto, señaló, se llevará a cabo en la cabecera municipal —La Cañada— para poder probar su factibilidad y posteriormente ser extendido a las comunidades.
Buscan concientizar a la población
Resaltó que actualmente ya se realizan actividades para concientizar a la población sobre la importancia de separar su basura en casa, asimismo se lleva a cabo la impartición de pláticas en escuelas, y se mantienen reuniones con representantes de comunidades para persuadirlos de realizar la separación de sus residuos.
“Estamos haciendo programas en escuelas, vamos a comenzar un plan piloto aquí en La Cañada, estamos haciendo reuniones con grupos de la misma comunidad estamos haciendo volanteo para comenzar una prueba piloto, para ver si con el apoyo del ciudadano empezamos a trabajar en el aspecto cultural de la separación del residuo”, persuadió.
Manifestó que lo que se busca en primera instancia es abaratar más los costos de confinamiento porque no es lo mismo depositar toda la basura que se produce en el municipio a dejar solamente 55 toneladas, ya que el resto es pet, cartón y botellas que es posible separarla y venderla o que se vuelva a procesar.
Falta deposito
Para concluir, Noriega Paredes reconoció que el principal problema del ayuntamiento marquesino es la falta de un sitio en el cual se puedan depositar los desechos, además de no contar con la infraestructura necesaria para poner en marcha un programa de separación de residuos, el cual espera ser impulsado este año.
“Nuestro gran problema hoy es que no tenemos la infraestructura para llevar a cabo la separación de la basura, tendríamos que adecuar nuestros camiones para realizar este trabajo, y no tenemos un espacio como un relleno sanitario donde nosotros tengamos las bandas separadoras, sino que dependemos de un tercero”, lamentó.
