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Desde 1969, en todo el mundo el 28 de junio se celebra el Día de la Diversidad Sexual; fecha que recuerda la tolerancia y respeto a toda forma de preferencia y convivencia sexual.
En Querétaro existen avances pero falta mucho camino por recorrer, y aunque es un tema que “está en el centro de atención” sigue siendo un tabú, afirmó Edmundo Ramos, presidente de la Asociación Civil SOS Discriminación Internacional.
Temas como los matrimonios entre personas del mismo sexo y el reconocimiento de derechos sociales y humanos sigue siendo un pendiente, los cuales no son abordados o aceptados por la cultura que prevalece en la sociedad y que rechaza estas formas de convivencia, explicó.
Hablar de diversidad sexual es incluir todas las expresiones de convivencia: la heterosexualidad, homosexualidad, incluso de la forma en que se visten y expresan muchas personas; personas travesti o que cambian de sexo.
El presidente de SOS refirió que el trabajo y acercamiento con autoridades es mayor que en otros años, pero aún hay pendientes.
A nivel nacional hay un llamado para todos los “gobernantes y legisladores, y todos los sectores de la sociedad, deben sumar esfuerzos para reconocer, respetar y proteger la diversidad familiar como una expresión de la diversidad sexual”.
En el marco de la celebración del Día mundial de la Diversidad Sexual, SOS hace un llamado especial a los funcionarios queretanos para evitar lenguaje discriminatorio hacia las personas con diferentes preferencias sexuales, y que además sea sancionado.
“Es necesario que las y los legisladores sancionen el uso del lenguaje homofóbico y discriminatorio en medios de comunicación para, evitar la difusión de mensajes de odio contra los grupos en situación de vulnerabilidad, como son la comunidad lésbico-gay-bisexual-transexual-transgénero e intersexual”, ello porque deriva en violencia, dijo.
Uno de los derechos que busca sea reconocido es el de la unión entre personas del mismo sexo, que en Querétaro fue rechazado en la Legislatura pasada, derecho que derivaría en protección de las familias de diversidad sexual.
La Iglesia Católica queretana ha mantenido una postura de rechazo a los matrimonios entre personas del mismo sexo; aunque dicen respetar las conductas de cada individuo.
Pese a este respeto, se basan en la Biblia que dicta que la familia —en concepto— está conformada por matrimonios heterosexuales.
Mauricio Ruiz Reséndiz, presbítero de la Diócesis de Querétaro y presidente de la Comisión Diocesana para la Pastoral Social, argumentó que la homosexualidad es una condición no natural.
