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Alejandro Tenorio, director de Protección Contra Riesgos Sanitarios de la Secretaría de Salud del estado, aseguró que desde principios de 2015 mantienen un operativo de fomento y vigilancia en todas las farmacias estatales.
Explicó que de los cerca de 600 negocios que hay en Querétaro, se han visitado al 60% y que en su primera inspección los verificadores buscan que los establecimientos cumplan con las reglas necesarias de operación, como permisos y condiciones adecuadas para mantener los medicamentos.
“Este programa empezó desde el mes de enero y terminará hasta el mes de diciembre, el cual consiste en visitar todas las farmacias del estado, en la que se revisa que tengan toda su documentación en regla que les permita funcionar sin problema, que en este caso es el aviso de funcionamiento y su aviso de responsable sanitario para que estén en orden”, detalló.
En caso de que las farmacias ofrezcan consultas médicas, éstas deben contar con un espacio destinado a ello y cumplir con la normatividad de un consultorio médico. Los doctores que atienden estos consultorios deben comprobar que tienen su título y que cuentan con su cédula profesional.
“En todos los puntos donde se ofrezca una consulta médica no deben tener comunicación con la farmacia, es decir, el consultorio debe ser independiente al negocio, deben tener entradas independientes”.
Alejandro Tenorio añadió que otra de las recomendaciones hechas a las farmacias visitadas por los verificadores es que los médicos no induzcan la compra de medicamentos propios del negocio, así como la correcta ubicación de los insumos.
“La ubicación de los medicamentos es importante, así como la temperatura que deben tener, sobre todo en lugares muy cálidos como Jalpan, donde hay una gran humedad”.
El funcionario reiteró que en el estado se tiene un registro de aproximadamente 600 farmacias funcionando, de las que ya han visitado el 60%.
El titular de la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios no descartó que el número de establecimientos haya crecido, por lo que señaló la importancia de mantener una estrecha vigilancia al respecto, para que estas farmacias cumplan cabalmente con las normas sanitarias.
“Este es un programa de fomento porque consideramos que la parte de la educación es la parte más importante para que las cosas mejoren, no nada más la autoridad regulatoria o sancionadora, sino la autoridad que se acerca a los comercios para explicarles cómo deben hacer mejor las cosas”.
Enfatizó que después de haber visitado el negocio y de haber hecho recomendaciones, se aseguran de que la farmacia en turno haya hecho caso a las indicaciones, de lo contrario, se pueden hacer acreedores a importantes sanciones, que pueden ir desde multas hasta el cierre del negocio.
“Por ejemplo, si llegamos a un consultorio y el médico que está ahí no nos puede comprobar su título y su cédula profesional, en ese momento suspendemos todo el servicio del consultorio”, puntualizó Tenorio.
