Sociedad

Monumento efímero, una mirada al Querétaro antiguo y moderno

La torre fue creada para conmemorar los 487 años de la capital del estado

Foto: Guillermo González
30/07/2018 |05:13Alma Gómez |
Redacción Querétaro
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Una torre de 12 metros de altura se plantó en el corazón de Querétaro durante todo el fin de semana, al centro de la Plaza Fundadores, en el barrio más antiguo de la capital. Fue un mirador efímero que permitió a los visitantes observar las dos facetas de la ciudad, la antigua y la moderna.

La torre llamada Monumento fue creada por el gobierno municipal de Querétaro en colaboración con una agencia de arquitectura, para conmemorar los 487 años de la ciudad.

El monumento fue hecho de andamios y escaleras, con 12 metros de altura y cuatro pisos cubiertos con lonas blancas, una gran franja de tela color rosa atravesaba el interior de los niveles. “Es una simulación de lo que es un pin, esa marca que aparece en los mapas cuando buscamos algún sitio o una ubicación”, explica uno de los jóvenes que guía a los visitantes.

La idea de Monumento es poner un hito moderno en las zonas de patrimonio, Querétaro cumple 487 años y los que estamos aquí debemos asegurar los años hacia el futuro, esta franja rosa es como un pin, lo que vemos en los mapas, la idea de esto es que sobresalga la estructura, desde unas calles alrededor de esta plaza ya puede apreciarse la torre, se distingue entre las cúpulas del centro.

La exposición duró sólo unos días, por eso le llamamos un monumento efímero, porque sólo unos cuantos tuvimos la oportunidad de apreciar la ciudad desde esta perspectiva”, comenta el joven guía.

Antes de avanzar, los encargados de la obra advierten a los visitantes sobre las vibraciones que se sienten cada vez más fuertes conforme suben los niveles en la torre, también recomiendan no subir al monumento si alguna persona tiene vértigo o presión alta. Una vez que las personas firman una responsiva, avanzan en grupos de siete.

Querétaro desconocido

En el primer piso se aprecia perfectamente el templo de La Cruz, y a medida que las personas suben de nivel, se tiene una vista cada vez más panorámica, comienzan a verse los techos de las grandes fincas, los jardines y las principales avenidas.

En el piso más alto se aprecia un Querétaro desconocido, uno más allá del patrimonio protegido por la UNESCO, más allá de cúpulas y casonas, se aprecian los fraccionamientos más modernos, una enorme mancha banca de nuevas viviendas que se expande sobre los cerros.

Se distinguen grandes áreas naturales como los cerros Cimatario y Peña Colorada, además del pulmón más grande de la ciudad, la Alameda Hidalgo. Un grupo de estudiantes de la Ciudad de México, que visita la capital durante las vacaciones, habla del crecimiento de la ciudad de Querétaro.

Venimos de visita a Querétaro porque tenemos amigos aquí, pero como turistas no nos damos cuenta de lo que ha crecido la ciudad, creemos que el Centro Histórico es todo porque es lo único que conocemos. Me gustó esta especie de mirador porque nos da una vista completa de la ciudad, es algo inusual y no te tardas nada en subir aquí y tener una vista diferente”, comenta uno de los alumnos.

Durante los últimos tres días, en redes sociales se compartieron un sinnúmero de imágenes y videos de la vista panorámica de la ciudad desde Monumento. En twitter por ejemplo se difundieron las imágenes con el hashtag #MonumentoQro.

Gran cápsula de tiempo

Sin importar las lluvias nocturnas o el sol abrasador, durante las tardes cientos de personas hicieron fila para subir al mirador, la mayoría de los asistentes fueron turistas, aunque no faltaron los queretanos como José Luis Gutiérrez, quien ha vivido toda su vida en el barrio de La Cruz.

Las personas que hemos vivido en Querétaro toda la vida, a veces nos cuesta creer que la ciudad haya cambiado tanto, yo por ejemplo casi siempre estoy en mi barrio, La Cruz, pero ahora que se me ocurrió subir aquí es que me doy cuenta de cómo ha pasado el tiempo y cómo va creciendo la ciudad”, comenta José Luis, quien describe el Centro Histórico de Querétaro como una gran cápsula de tiempo que se mantiene intacta a pesar del crecimiento a su alrededor.

Como parte de esta actividad, también se contó con la participación de danzantes que a través de sus conchas de mar, saludaron a los cuatro vientos desde las alturas. Además se instalaron algunas mesas en las que participaron niños y adultos que escribieron o dibujaron mensajes de salud y prosperidad para la ciudad.