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No ha habido ningún caso de Covid-19 en los habitantes del centro de reinserción Alcanfores; además, todos fueron vacunados contra la influenza, dijo la directora del Instituto para Prevenir Conductas de Riesgo, Adriana Bouchot.
“Hasta el momento, ninguna persona de las 152 que han estado en Alcanfores presentaron Covid-19”, recalcó.
Reconoció que hubo tres personas que presentaron algunos síntomas similares a los de Covid-19, por eso se les realizó la prueba y todos salieron negativos.
“Tenemos vínculo con ciertos centros de salud. Todo Alcanfores fue vacunado contra influenza, previniendo que todos tenemos que tener esta vacuna”, refirió.
Aseguró que el delegado del Centro Histórico, Salvador Martínez, ha establecido un vínculo con los vecinos del parque; sin embargo, algunas personas han manifestado cierta inconformidad, sobre todo, porque les gustaría hacer uso del espacio completo como antes de la instalación del centro. “Una de las inquietudes es abrir Alcanfores, el espacio que ocupan las personas en situación de calle son dos hectáreas. Se está haciendo está valoración y que puedan ser usados por los vecinos”.
Aseveró que la intención es mover el centro y que la fecha planteada es diciembre o enero. Actualmente, dijo, hay un trabajo interno para conocer presupuesto y espacios posibles.
“Algo fundamental es que se consolide el trabajo en un programa de políticas públicas del municipio, en el que se involucren todas las dependencias”, puntualizó.
La funcionaria reconoció que la creación de instalaciones para un centro de reinserción rebasa al instituto, por eso se trabaja en la creación de un reglamento que se apruebe por el Ayuntamiento y así se consolide una política pública interinstitucional y transversal.
A principios de la contingencia Alcanfores se abrió como un espacio para resguardar a las personas en situación de calle y que así estuvieran en un lugar con menor riesgo de contagio.
Fue hasta agosto cuando se convirtió en un centro de reinserción social, en el que se pretende apoyar a los inscritos al programa para conseguir un trabajo estable, acceder a ayuda sicológica, así como a talleres de educación financiera y cultura del ahorro. El objetivo es que en máximo cuatro meses puedan encontrar una vivienda para rentar y así dejar el centro.
Bouchot recordó que en las próximas semanas dos mujeres podrán alquilar su propia vivienda, a quienes se les dará seguimiento y tendrán el apoyo emocional y de contención que requieran.
Añadió que hay otras 12 personas que tienen un trabajo estable y que próximamente van a recibir el taller de educación financiera, para que puedan ahorrar y regresar a actividades cotidianas.
